Porque aunque algunos disimulen o traten de mostrar un desinterés absoluto hacia el destino, no dejen de reconocer que viajar en verano a Ibiza es un sueño para cualquiera de ustedes. Elegirán otros lugares de veraneo por otros motivos, porque razones habrá y todos buenas; y porque hay muchos lugares que conocer y que merecen la pena, o porque este año no es el más apropiado. Pero, Ibiza siempre, y en verano, es el sueño del estío de cualquiera.
Resulta difícil hablar de Ibiza y no pensar de inmediato en sus noches, discotecas, fiestas y desenfreno. Pero las Pitiusas, como denominaban los griegos a las islas de Ibiza, Formentera y los islotes adyacentes, tienen una antigüedad y una importancia vital en la historia del Mediterráneo. Baste mirar los vestigios que sus antiguos pobladores y colonizadores han dejado en ella. Y es que esta preciosa isla del archipiélago de las Baleares es mucho más que sus noches de fiesta, que también, por supuesto. Se pueden encontrar hasta consejos para poder sobrevivir a unas vacaciones que prometen ser de todo menos aburridas.
Viajar a Ibiza, como todos saben, es algo que se desea, llama la atención y roza lo pasional. Recordar cómo se fueron asentando los primeros hippies, inaugurando locales de ocio nocturno, sus paisajes, puertos y marinas deportivas que la convierten en destino privilegiado de los amantes de la navegación deportiva. Es necesario tener claro qué quieren hacer en su visita para no perderse en un mundo de posibilidades que algunos creían limitarse a dos opciones: mar y fiestas. Existen guías donde les orientarán sobre qué hacer en la isla, sino se quieren encontrar contando sus experiencias como turista despistado.
Encontrarán una agenda de fiestas y eventos para el verano de una cantidad y calidad de actividades que no verán en ningún otro lugar y no sabrán cuál elegir. Aparte de su agenda cultural para todo el año, porque en la isla también hay vida más allá de septiembre. Pero no solo es un destino para agotarse en fiestas y acabar extenuado de tanta marcha, también pueden gozar de la belleza y relax que les ofrecen sus playas y unas calas maravillosas que en esta época más si cabe, merece la pena conocer y perderse en ellas; disfrutar de la paz de la naturaleza en un entorno mágico en un destino en el que muchos creían que esto no podía existir aún.
Y como anticipo de un verano inolvidable, y si aún les falta el último empujoncito, visiten Playas de Ibiza y decídanse a vivir un verano que no habían imaginado.