Era junio de 2008 cuando el juez, Baltasar Garzón, cerraba la operación Troika, con 20 detenidos en Málaga, Mallorca, Alicante y Madrid, entre ellos, El Jefe de la mafia rusa Tambovskaya, Gennadi Petrov. La investigación, en la que trabajaron 300 agentes, se prolongó durante más de 2 años. Llevar a juicio a algunos de ellos, ha llevado casi una década.
Concluyen las vistas
En unos días concluyen las vistas orales, contra los 18 que quedan de aquellos 27 implicados en el blanqueo de dinero sospechoso de proceder de los países del Este, y que podrían obtener a través de crímenes, droga, robos, extorsiones y cumplir objetivos del Gobierno ruso. Capitales que traían a España y que lavaban con la compra de inmuebles, yates, coches, joyas, obras de arte… la Fiscalía pide entre 5 años y 6 meses; y 8 años y 6 meses de cárcel, para quienes se sientan en el banquillo.
El Jefe
Un banquillo de acusados en el que no está Gennadi Petrov, conocido como El Jefe de la Tambovskaya, una de las mafias rusas más poderosas y que se asentó en España en 1996. Petrov y su familia: su mujer y su hijo Antón, están todos huidos desde 2012, cuando se le dio la libertad condicional, tras el pago de una fianza.
Calvià
Los Petrov habían vivido hasta entonces en una mansión de las costas de Calvià (Mallorca) que, en enero de 2014 la Audiencia entrega a la fundación Amadip Esment, dedicada a la ayuda de discapacitados intelectuales.
El gran ausente
Gennadi Petrov es el gran ausente, por jefe, y por la repercusión internacional que la operación Troika alcanzó, que llegó a colocar a los agentes que desarrollaron la investigación, en el primer puesto en la lucha contra la mafia rusa que se libra en decenas de países desde hace décadas.
Otros 8 fugados
No solo la silla de Petrov está vacía. En el juicio no han comparecido otros 8 detenidos en aquellos días de junio de 2008, entre otros, el hombre de confianza de El Jefe: Alexander Malyshev, y el carismático Alexander Khristoforov. Los 9 están fugados, pero estos tres, se sabe, que desde 2012.
Gennadi Petrov
Las circunstancias de la vida de Gennadi Petrov, asentado en tierras mallorquinas desde 1996, son propias de la novela negra rusa, de esos relatos de intriga y sangre, en los que el protagonista malo se adorna de grandes lujos, fiestas, influyentes amistades y derroches, y que extienden sus tentáculos de poder donde ponen el ojo y, a veces, la bala.
Una fianza de rebajas
El Jefe, arrestado en junio de 2008, logró salir de la cárcel, el 27 de enero de 2010, con una fianza de 600 euros, que le impuso la Sección Cuarta de la sala de lo Penal de la Audiencia Nacional. Pero parece que, en realidad, la fianza quedó en 400 euros, al considerar el juez Baltasar Garzón que el riesgo de fuga había disminuido, aunque la Fiscalía opinaba lo contrario.
Libre
Además de la rebaja, la sala 2 de lo Penal atribuye al imputado Petrov arraigo personal, familiar y laboral en España, por el hecho de que su mujer y su hijo residen en Mallorca, y acude a un colegio español. Así, Petrov queda libre y regresa a sus negocios, a la vida distendida entre paredes de mármol y cuadros de museo.
La madre Rusia
Parece, que en los siguientes meses llega a un acuerdo, por el cual las autoridades judiciales le dejan viajar a la madre Rusia, mientras espera la sentencia, y para ello, en señal pone de garantía sus posesiones en España: inmuebles valorados en más de 50 millones, incluida la mansión y residencia familiar de Calvià.
Billete de ida
El primer viaje fue bien, porque regresó, como había prometido; el segundo le fue mejor a él, porque nunca más se supo, solo compró billete de ida para él y su familia. Desde entonces se sospecha que viven en San Petersburgo; o no, dado que Petrov ha demostrado que le gusta el sol.
Putin
En esos meses, se dice que el fiscal José Grinda comentó que Gennadi Petrov mantenía estrechos y peligrosos contactos, desde su puesta en libertad, con las autoridades rusas, que se mueven entre las sombras de las mafias, así como la posible vinculación a ellas del primer ministro ruso, Vladimir Putin, gobernante al que se le atribuyen muchos episodios unidos a las mafias del país.
Búsqueda internacional
Por eso, cuando el 13 de julio de 2016 (8 años después de ser apresado y 4 de su fuga), el juez de la Audiencia Nacional, José de la Mata, dicta la búsqueda internacional de Gennadios Petrov, había pocas posibilidades de encontrarle, como desde la primera sesión del juicio de la Troika se ha demostrado.
Cientos de millones
Es como si Petrov estuviera convencido de que ha cumplido con España, en la misma medida que el Mediterráneo balear le proporcionó satisfacciones y tranquilidad, al menos, entre 1996 y 2008. Es más que probable que durante esos años movieran por territorio español cientos de millones, ya fuera en pesetas o en euros, de los que muchos se han beneficiado.
Compra venta
La compra venta de terrenos, casas, calificaciones urbanísticas y voluntades, apuntan a que El Jefe de la Tambovskaya ejerce esas dos personalidades tan comunes en los personajes turbios de ficción: la generosidad y la crueldad. Lo mismo mandan liquidar a quien le traiciona o desobedece, que le prestan su avión privado a un colaborador que lo necesita, para convencer a su mujer, con un viaje, de su absoluta fidelidad.