La Federación Andaluza de Balonmano celebró el pasado sábado sus V Premios Andalucía de Balonmano, el evento se realizó en el Restaurante La Borraja San Nicolás (Granada), acto en el que se reconoció la labor de distintas personas e instituciones, aunque por desgracia, el patinazo de la federación andaluza (presidida por Antonio Rosales) con alguna que otra persona fue de los gordos.
Llama poderosamente la atención que entre los premiados estuviese Manuel Jiménez Barrios, vicepresidente de la Junta de Andalucía, que recibió la Medalla e Insignia de Oro y Brillantes de la Federación Andaluza, huele más a un acto de coqueteo que de méritos.
Eso si, la misma insignia también fue entregada José Domingo Fernández Durán, delegado en Sevilla de la FABM; Manuel Vera Ávila y Manuel Casado Fernández, exárbitros ASOBAL; Daniel Cordoncillo Bautista, miembro del Comité de Árbitros; los entrenadores Miguel Ángel Florido, José María Jiménez y Antonio Reyes y Manuel López, portero del ARS Palma del Río.
No aparecen por ningún sitio los nombres de Diego Carrasco Becerra (Entrenador Rincón Fertilidad) que esta recién acabada campaña ha metido a su equipo en competición europea, siendo este el único equipo andaluz de balonmano de ambas categorías (masculina y femenina) que va a llevar el nombre de Andalucía mas allá de nuestras fronteras. Tampoco se nombra a María José Moreno, presidenta del Rincón Fertilidad que asumió con valentía la presidencia que dejó, tras 21 largos años siendo la cabeza visible y de máxima responsabilidad del club malagueño, Carmen Morales de Setién. Especialmente sangrante es el caso de Carmen, su gestión durante más de dos décadas al frente del balonmano malagueño podría servir de tesis en facultades de ciencias económicas y empresariales, profesional de máxima dedicación, dejó la presidencia el verano pasado y para sorpresa de muchos, nadie en la federación andaluza se acordó el pasado sábado de homenajear a una mujer guerrera que ha luchado por el balonmano 21 años en la provincia de Málaga. Sin calificativos.
Y entre canapé y canapé, desde Almería esperan que la propia federación andaluza cumpla con los pagos pendientes a sus mesas de la competición, un pago que se espera desde diciembre, ya ha llovido. Parece que para pagar y acordarse de sus trabajadores, de los que luchan y levantan año a año el balonmano, no hay dinero, pero para celebrar una gala por todo lo alto no falta un detalle, cena y hospedaje costeado por la federación para más de un centenar de personas que se reunieron en dicha gala, hagan cuentas. Cabe destacar que el presidente de la Andaluza, Antonio Rosales, es vicepresidente de la Federación española, ¿qué pensará Blazquez de todo esto?.
Duele ver que en muchas ocasiones, la falta de tacto y señorío, de ética y de profesionalidad, es lo que predomina en federaciones que deberían dar ejemplo de cordura, buena gestión y seriedad, estas tres virtudes brillan por su ausencia en la federación andaluza de balonmano que está pidiendo a gritos, una regeneración, un cambio de rumbo de manos de profesionales con ideas y ganas de trabajar más por los que levantan el balonmano desde la base, más por quienes lo sufren sin cobrar un céntimo y menos por los que solo buscan la foto sin mover un dedo en favor de este bonito deporte.