La separación del torero Enrique Ponce y la celebritie Paloma Cuevas ha sido una de las grandes sorpresas del verano. Además, el torero ya ha rehecho su vida al lado de la joven estudiante de Derecho, Ana Soria. Pero, la colaboradora del programa “Sálvame”, Gema López, ha impactado a la audiencia al asegurar que para Paloma Cuevas todo lo que está teniendo lugar es un duro golpe ya que hace apenas tres meses (cuando el matrimonio pasaba junta el confinamiento en la finca familiar) intimaron y Paloma tenía esperanzas de poder salvar su matrimonio. Esto demostraría que el torero habría compaginado su matrimonio con su noviazgo con la joven Ana Soria.
Enrique Ponce está viviendo una segunda juventud al lado de Ana Soria. Las imágenes de pasión y mimos en la pareja son una constante y el torero se está comportando como un auténtico adolescente enamorado, una forma de ser que nunca se había dejado ver en público. Pero, los colaboradores de televisión siguen teniendo muchas dudas sobre la fecha exacta en la que inició su noviazgo con Ana. Algunos siguen manteniendo que se conocen desde hace dos años y otros que solo llevan ocho meses (la versión dada por el torero).
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Todo es un auténtico misterio alrededor de esta relación y es que las versiones sobre la fecha de la ruptura del matrimonio dada por Enrique Ponce y por Paloma Cuevas no coincide. Y, por encima, Gema López soltaba una bomba en el plató de “Sálvame”: A lo largo del período de cuarentena, personas próximas a la pareja aseguran que hubo un acercamiento hasta tal punto que mantuvieron relaciones maritales. Hay que recordar que el matrimonio pasó junto los tres meses que duró la cuarentena por el coronavirus en la finca que tienen ubicada en la provincia de Jaén junto a sus hijas y los padres de Paloma. Pero, el círculo de amistades de Enrique mantiene que llevaban casi dos años ya separados y llevaban vidas completamente separadas. Una información que cuestiona al torero pues ya en ese momento mantenía un noviazgo con la joven de Almería por lo que había solapado las dos relaciones en el tiempo.
Pero las cosas no acabaría ahí. Después de este acercamiento físico que Paloma entendió como la recuperación de su vida matrimonial, la empresaria ha tenido que abrir los ojos ante un duro golpe de realidad. Gema asegura que Ana fue la que puso entre la espada y la pared al torero al enterarse de lo que había pasado: Enrique tenía que elegir entre continuar con su vida o empezar una relación en serio con la joven. Por esa razón todo acabó precipitándose.
Paloma Cuevas ha decidido confinarse en la mencionada finca acompañada de sus dos hijas y sus progenitores. Según sus personas más allegadas, la empresaria lo está pasando realmente mal ya que no entiende que su todavía marido haya apostado por una exposición tan pública con su nueva pareja. Pero no tiene nada malo que decir sobre el padre de sus hijas y Enrique siempre formará parte de la vida de la familia, de su vida.