Hacer un programa que se dedica a desmontar las noticias falsas en el mundo de la política le está empezando a pasar factura a Risto Mejide. El tema de moda en España está generando una serie de bulos que día sí, día también; son desmentidos en Todo es Mentira. En el momento que el publicista se ha dedicado a señalar y apuntar quienes están detrás de todo esto, los ataques se han vuelto más furibundos llegando a inmiscuír a él y a su familia en un escarnio generalizado que solo busca socavar la imagen de un formato necesario en un tiempo que las noticias falsas son distribuidas de manera viral por todas las redes.
Las falsedades atribuidas a Risto Mejide
Dando la vuelta a la tortilla, Todo es Mentira está en el ojo del huracán por la promoción de "fake news" respecto a todo lo que tiene que ver con el COVID-19. Sin embargo, todas estas informaciones se desmienten por sí solas comprobando los fragmentos en la propia web del programa. Días antes de la cuarentena, un desafortunado sketch donde Risto Mejide afirmaba que una de las personas en plató tenía coronavirus ha sido uno de los misiles dirigidos al empresario, que posteriormente desmintió esa información y afirmó que solo se trataba de algo preparado en un tiempo en el que se estaba alarmando más de la cuenta y que no había ningún infectado real. Sin embargo, los ataques no han cesado y se ha puesto en duda las entrevistas a varios expertos asociándolos con varios miembros de Podemos o se han viralizado videos manipulados editados donde se intenta expresar que se dicen cosas que no se han dicho. La última andanada, tal y como se hizo con José Bono y su hijo gay, ha ido directamente a sus hijos. Este despreciable gesto ha hecho que el entrevistador y su mujer Laura Escanes apunten directamente a los responsables de las falacias: VOX.
¿Pero así cómo os va a tomar alguien en serio? FAKE NEWS FAKE @vox_es manipulando vídeos cortados y mintiendo https://t.co/VkRmOqsTFq
— Laura Escanes (en casa ??) (@LauraEscanes) March 15, 2020
Risto Mejide explota contra VOX por sus hijos
Risto Mejide se está ganando muchos enemigos desde que comenzara Todo es Mentira en Cuatro. Su irreverente programa tardó mucho en despegar de audiencia e incluso abusó de polémicas algo forzadas con personajes mediáticos bien localizados en el espectro ideológico como Eduardo Inda. Sin embargo, siempre han sabido llevar bien las críticas y aprovecharlas en su propio beneficio. La cosa ha cambiado cuando se han sobrepasado los límites de las falacias incluyendo a su propia familia (donde hay dos menores de edad). Según Risto, la campaña de VOX se compone de bots y simpatizantes dispuestos a difundir mentiras sin ningún tipo de ética, moral y/o respeto. Algunas de estas informaciones revelan intimidades y datos personales de su hijo mayor, fruto de su relación con la presentadora Ruth Jiménez. Por supuesto, la información no se hace a través de un medio de comunicación sino a través de mensajes en foros o grupos de redes sociales e incluso capturas. En el caso de su hijo menor, el instagram de su mujer Laura Escanes se ha convertido en un vertedero de vómitos (por cierto, bastante machistas) que no solo atacan a la influencer sino a su hijo de manera indirecta. Estas execrables actitudes comparten modo de desarrolo con el bulo de la amante de Pablo Iglesias y que fue la causa del divorcio con Irene Montero o la falsa acusación de ánimo de lucro del futuro marido del hijo de José Bono. Risto ya se ha pronunciado en redes sociales y, muy probablemente, y al meterse con la intimidad de dos menores (anónimos, inocentes y ni mucho menos con capacidad de defenderse) se buscaran responsabilidades judiciales con el partido de Santiago Abascal.
La estrategia de desacreditar al contrario usando el escándalo
Si algo molesta a los políticos, es que se destapen sus estrategias. Cuando se inician determinadas campañas dirigidas a influir a los ciudadanos con el único objetivo de conseguir rédito político, las dos Españas se vuelven a polarizar. Todo es Mentira siempre ha intentado destapar este tipo de comportamientos cuando ha visto signos de falsedad en ellas y eso, ha creado incomodidad en los núcleos de los partidos. Risto Mejide ha pasado de ser un opinólogo mediático con cierta repercusión a denunciar las cloacas de determinados estamentos. Si la mentira es desmentida, los mentirosos no obtienen recompensa; por lo que toca usar otras armas. El hecho de meterse con las familias no es ya un comportamiento irrespetuoso habitual en redes sociales, sino una maniobra bien montada para desgastar al que ofrece información veraz e incómoda. Ese es probablemente el sucio plan que se está llevando a cabo con Risto: "Si sigues molestando, destrozamos a los tuyos". Y no, no es casual. No se trata de un "hater" o "troll" que deje mensajes en las redes, son unos mecanismos dedicados a generar odio y al difama, que algo queda. Es muy dudoso que Mejide ceda ante este tipo de mensajes, así que habrá que estar atentos a como se sigue desarrollando la campaña de algunos que, visto lo visto, se están ganando una buena fama de mentirosos.
Risto Mejide y su extraño lugar en Mediaset
No se le puede calificar de verso suelto y probablemente, Todo es Mentira haya cometido muchos errores (uno de ellos hacer mofa sobre Iker Jiménez cuando dio la voz de alerta); pero lo cierto, es que si hay un programa informativo de esa casa que se está centrando en la información y en el necesario desmentido de noticias falsas ese es el de Risto y su equipo. Hace tan solo unos meses, un programa especial de investigación destapaba las cloacas del periodismo y logró incluso algunas aclaraciones por parte de periodistas libres de toda duda como Maria Escario. Sin embargo, por parte de Mediaset solo recibió la indiferencia por respuesta. El propio Mejide reprochaba en directo a Carme Chaparro que no se hicieran eco de lo que allí se destapó. Sin embargo, el asunto va más allá y tendría que ver con una guerra interna entre el publicista y Ana Rosa Quintana. El asunto del comisario Villarejo, la diferencia de línea de pensamiento y el despido de Javier Negre son solo algunas de las causas de una batalla implícita que los espectadores pueden observar. Si Ana Rosa dice una cosa, Risto lo desmiente por la tarde; si Todo es Mentira da una potente exclusiva, Cuatro al Día (de la productora de Quintana) no hace la más mínima referencia. Esta guerra de empresas mantiene al público confundido aunque se intente vender como pluralidad, pues no es cuestión de líneas editoriales sino de una competición profesional y personal.