El mundo esotérico o astral es un ámbito muy diverso, donde convergen diferentes rituales para adivinar sobre el futuro de nuestra vida. Salud, dinero, trabajo, amor,… las personas acuden al esoterismo para que les ayuden a su vida. Uno de los métodos de predicción más utilizados por los videntes y especialistas esotéricos son los horóscopos. Un arte donde cada cierto periodo de tiempo le pertenece un signo (representado con un símbolo), teniendo así unos determinados valores o comportamientos en cada uno de ellos. Por ello, suele ser muy común encontrarnos horóscopos diarios, tanto en medios audiovisuales como en TV y medios digitales, con el objetivo de ayudar a las personas que quieren saber su futuro próximo.
El horóscopo, un mundo milenario con diferentes tipos
A la hora de estudiar el horóscopo, hay que destacar que es un método de predicción cuyo objetivo es estudiar la posición de los astros en el momento en que nace la persona. Una tradición que ha ido extendiéndose con el paso de los años y también de civilización en civilización. Desde la Antigüedad, se han observado diferentes fenómenos parecidos a los astros como los sumerios, que observaban la posición de los astros en el 6000 a. C. No fue hasta el siglo V a.C. cuando en Babilonia comenzaron a potenciarse el arte de predecir el futuro a través de los signos del zodiaco gracias a Alejandro Magno.
De este modo, en la actualidad se pueden establecer diferentes tipos de horóscopos establecidos en cada una de las civilizaciones. Uno de los más extendidos es el horóscopo zodiacal, en base a los 12 signos del Zodíaco (Aries, Tauro, Géminis, Cáncer, Leo, Virgo, Libra, Escorpio, Sagitario, Capricornio, Acuario y Piscis) y que nos llega de la mitología griega. En ella, están representados por diferentes objetos, ya sean animales, humanos e inertes, y divididos en cuatro grandes bloques: signos de fuego, de aire, de tierra y de agua. Un horóscopo tradicional donde cada uno de los signos tienen una característica determinada en base a aspectos como el carácter, el comportamiento, o la energía que puedan desprender de manera social.
No obstante, dada la diversidad de civilizaciones en todo el mundo con el paso de nuestra historia, el horóscopo no es el mismo en todas partes, y se han obtenido variaciones del mismo. Los aztecas realizaron un horóscopo de 12 signos que representan a diferentes objetos y animales de la zona, siendo así una interpretación de la cultura Azteca sobre el horóscopo Maya.
Por su parte, la cultura de los Mayas asientan su horóscopo en 13 signos que proceden exclusivamente de animales de su fauna. También, uno de los más famosos es el horóscopo chino, que tiene 12 signos y están representados con animales de la zona asiática. Una peculiaridad de este horóscopo es que es anual, por lo que cada año le pertenece a un animal en concreto y va variando con el paso de los siguientes años. El Indio, el Celta, el Gitano o el Druida son algunos ejemplos de la variedad de horóscopos que existen en nuestra cultura.
Por ello, las predicciones con horóscopos están siendo muy utilizados por los videntes profesionales. Una predicción del que millones de personas en todo el mundo siguen cada día como les podrá ir su futuro en base a lo que dicen su signo. Su visibilidad en medios de comunicación y en las redes sociales hacen que este método de predicción consiga cada vez más fieles en todo el planeta.