El programa de Sálvame comenzaba esta tarde con Antonio Montero al lado de Cristina Soria charlando con ella para terminar de aclarar todo el tema de Lydia Lozano. La sorpresa ha venido cuando quien estaba como presentador esta tarde que ha sido Kiko Hernández preguntaba a Antonio Montero si le ocurría algo más allá personal que estuviese haciendo que su estado de ánimo y mal humor estuviese más al límite que nunca y el colaborador no negaba ni afirmaba para dejar a todos en un mar de dudas.
Cuando Jorge Javier Vázquez llegaba a las cinco para tomar las riendas del programa se encontraba con un Antonio Montero descolocado y con miedo a contar todo lo que estaba pasando por su vida y cuando menos lo esperaban, Antonio Montero se ha decidido a hablar alto y claro.
"Tengo un tumor", "En junio del año pasado, estaba echándome crema y me noté un bulto enorme en el muslo." "Me operaron y encontraron una pelota de tenis prácticamente, tenía un tamaño enorme y me han tenido que quitar un músculo entero para que esto no se extendiese".
Antonio Montero asegura que no quiere que se hagan dramas respecto a su estado de salud porque lo cuenta por si sirve de ayuda a alguien. El colaborador asegura que su ex mujer Marisa ha estado a su lado y que no tuvo que modificar su testamento porque lo tiene tal y como cree que debe tenerlo desde hace muchísimos años.
"Soy y he sido un privilegiado". Antonio Montero decía que ha tenido una vida digna de desear por cualquiera en la que ha conocido muchísimos países y ha vivido experiencias que sabe que no están en la mano de todo el mundo.