La ganadora de 'GH VIP 6', la princesa inca, Miriam Saavedra ha contado algunas anécdotas de su vida, entre ellas reveló su secreto mejor guardado: un par de intentos fallidos de matrimonio.
Cuando pensábamos que sabíamos todo sobre la vida la princesa inca, ha dejado claro que no es así y que siempre hay algo nuevo por concocer.
Con un poco de vergüenza, pero si muy decida a contarlo todo, la ganadora de 'GH VIP 6' ha confesado un secreto de su juventud. Y es que con apenas 18 años, siendo “muy pequeña” conto en su canal de mtmad, 'Princess Inca' que estuvo a punto de casarse.
Con el humor que la caracteriza, Miriam ha destapado la olla donde guardaba los detalles sobre cómo al final de aquel fallido intento de boda, habría dejado plantado y esperando a quien fuera su pretendiente, el gran amor de su juventud.
Entre sus confesiones la Princesa Inca también ha asomado algunas palabras para su ex Carlos Lozano quien en su momento le dio un anillo de compromiso. Igualmente, en este caso la boda se quedó a mitad del camino.
Otras anécdotas de su vida
Miriam reveló además que a los 17 años se habría realizado un tatuaje, muy a pesar de la negativa de su madre. La peruana mostró una mariposa con una estrella que adorna su antebrazo izquierdo.
También dijo haberse realizado un segundo tatuaje “por amor”, del cual dijo que es mucho más grande, sin embargo, no lo mostró ante las cámaras. Eso si, fue enfática al asegurar que no se arrepiente de sus tatuajes.
La ganadora de 'GH VIP 6' también admitió que es celosa solo cuando hay motivos, no obstante, aseguró que está aprendiendo a no serlo y a quererse más.
También dijo con un poco de vergüenza que nunca ha fingido un orgasmo, pues dice que cuando miente se le nota mucho y que en esos momentos románticos es “muy sincera”.
Un error de dicción
Durante su intervención, Miriam Saavedra intentó dar a conocer a sus seguidores que no es “supersticiosa” y que fue criada bajo principios religiosos. Sin embargo, claramente y en tres oportunidades se le escucha decir la palabra “superficiosa”.
Ante la reincidencia en el error, nos queda la duda si fue un “gazapo” que se le ha salido a la peruana o si en realidad desconoce la forma correcta de pronunciar la palabra “supersticiosa”, adjetivo femenino de quien cree en supersticiones.
