Antonio Tejado es como le dice María Jesús con cariño “un niño chico”, aunque que él nos ha querido vender un amago de madurez que no solo no hemos visto en su comportamiento, sino que ayer saltó definitivamente por los aires.
Una noche de bodas frustrada
La 'noche de bodas' con María Jesús, en la que él se las prometía tan felices, creyendo que a la Miss la tenía a punto de caramelo para consumar su pasión, resultó un enorme fiasco para el sevillano. Hubo tonteo, hubieron risas, hubo cariño, pero no hubo el ansiado edredoning.
Por más que se hayan empeñado desde GH DÚO en ofrecernos una imagen desde los pies de la cama en la que parece que hay movimiento bajo el edredón, las cabezas de Antonio y María Jesús nunca se sumergieron en las profundidades y la cosa no fue a mayores.
El abandono de lecho conyugal por parte de ella ya de madrugada, fue aprovechado por él para poner cara de mártir, llorar como acostumbra cuando no se sale con la suya y pasearse como alma en pena por la casa.
Ya por la mañana, no solo no le pidió grandes explicaciones a María Jesús, sino que le dijo que sabía que se había sentido agobiada y que lo entendía y ella le explicó que así era. Que no quería que nadie pensase que entre ellos había habido algo sexual y que además de hacer mucho frío en la suite, pensar que se pudiese malinterpretar la situación era lo que había hecho que se fuese a su cama.
El cariño entre ellos parecía claro y Tejado volvió a jurar ya perjurar que estaba de acuerdo. Pero ya conocemos el dicho: “Dónde dije digo, digo Diego”, y la desafortunada visita de su ex novia Candela, hizo volar esa noche todas sus buenas intenciones, si es que las había, por los aires.
Antonio se confiesa con Carolina e Irene
Sucedió en la lavandería durante la mañana de ayer viernes. Antonio Tejado demostró una vez más no solo su inmadurez, también un machismo que por lo visto está grabado a fuego en su ADN. No perdió el tiempo en quejarse amargamente a Carolina, esa mujer de mente tenebrosa, que cual polilla revolotea buscando la luz que más calienta.
El machismo de Antonio quedó patente, una vez más, cuando dijo que María Jesús al inicio de estar ambos en la suite iba como un avión pero que no pasó nada y que no lo entendía. ¿En qué quedamos alma de cántaro? ¿No le dijiste que la entendías?
Carolina no perdió el tiempo para hacer lo que acostumbra, que es meter “m” y afirmó que a él lo ve más entregado que a ella, que si a una mujer un hombre le interesa de verdad, se pone el mundo por montera y se deja llevar por el momento, que a él se lo creía pero a María Jesús no y que él actuase en consecuencia. Un machaque en toda regla.
Ya intentó que María Jesús rompiese con Antonio, cuando hace unos días ella le confesó sentirse agobiada porque a pesar de haber dejado claros los límites de su acercamiento, él no parecía querer respetarlos.
La estrategia no le salió bien con ella, pero ayer aprovechó a fondo la ocasión con Antonio que tiene una personalidad muy cuestionable.
A él la verborrea le pierde, no solo negó varias veces estar enamorado (ya se lo había dicho así a Candela) sino que como un auténtico Judas vendió a María Jesús, confesando que estaba seguro de que su amigo Kiko, casi su hermano, lo había salvado y que siempre habían salido mal sus relaciones por entregarse en cuerpo y alma a sus parejas, pero que ahora debía pensar solo en él y que por nadie iba a perder la oportunidad y fallarle a su compadre. ¿Queda claro, no?
O sea, que intuyendo que no está nominado y que puede que la nominada sea esa de quien dice es su “gran apoyo”, ha decidido apartarse de ella. A ver si los que tanto hatean a la Miss, abren los ojos, ven de donde parte la verdadera manipulación y de paso dejan de insultarla en las redes.
La segunda estratega en la sombra
A la comida de coco de Tejado por parte de Carolina se unió la otra estratega en la sombra, Irene Rosales que quiere a María Jesús fuera de la casa más pronto que tarde, aprovechando la ocasión para echar más leña al fuego.
A todos sorprendió que se posicionase detrás de María Jesús cuando esta estaba nominada con Sofía. Asegurando que la Miss era su amiga y quererla mucho, pero dando esta explicación peregrina: “No quiero que se vaya Sofía porque me gustaría conocerla más y llevarme otra amiga".
Ayer su estrategia quedó totalmente clara. La Miss es una rival fuerte que se ha salvado de dos nominaciones y que no es abucheada e Irene no necesita que Kiko haga como Fortu cuando le dijo a Yoli que fuese a por el más fuerte.
Irene viene con la lección aprendida de casa y de forma sibilina va a seguir yendo a por María Jesús si no es expulsada este jueves, que no lo será.
Irá nuevamente a por ella de la forma que pueda, eso sí, con aire inocente y sin bronca de por medio. Ayer Carolina y Tejado se lo pusieron en bandeja.