El acceso a agua potable puede ser algo que desde los países más desarrollados vemos como algo ‘normal’, pero son cientos de millones de personas en todo el mundo los que no tienen acceso a agua potable o cuya fuente está contaminada, es por ello por lo desde la ONU fomentan siempre la investigación que logre que estas cifras se acerquen lo más posible al 0.
En esta ocasión, el invento proviene de tierras niponas y su nombre es Poly-Glu. Este descubrimiento japonés de la empresa GoodWater se trata de una coagulante en forma de polvos que hace que toda la suciedad del agua caiga al fondo del depósito de agua y de esta manera sea más fácil la limpieza y purificación del agua.
Poly-Glu puede emplearse tanto en recipientes pequeños como garrafas de agua o en grandes depósitos (lo más recomendable) para poder mejorar el acceso al agua potable en zonas donde la población no puede tenerlo por problemas de infraestructuras, guerras o catástrofes naturales.
Actualmente ya se está empleando esta solución en países como Sumatra, Tailandia, México, Kenia, Burundi y, recientemente, Sierra Leona, de la mano de la ONU y sus misiones en las distintas zonas.