Uno de los aspectos que explican el gran éxito de Ciudadanos en las últimas elecciones autonómicas catalanas al convertirse en la primera fuerza de corte claramente español, que vence en escaños y en número de votos a las fuerzas nacionalistas e independentistas; es la capacidad de transversalidad que ha adquirido como formación política.
TRANSVERSALIDAD
Hay que recordar que en estos últimos años de gran intensidad política para este país, con el surgimiento de nuevas formaciones políticas en el tablero nacional, la palabra transversalidad tomó gran protagonismo al ser utilizada de forma habitual por uno de los principales líderes políticos de Podemos, Iñigo Errejón, en referencia a que este elemento era una de las claves para poder sumar respaldo ciudadano mayoritario a determinado proyecto político.
Ciertamente la formación morada se aplicó la capacidad de ser transversal y durante 2014 y 2015, incluidos procesos electorales autonómicos, municipales y generales, logró concitar un amplio respaldo ciudadano con procedencias de diferentes espectros ideológicos.
Posteriormente y si continuamos haciendo historia, la formación liderada por Pablo Iglesias terminó con esa capacidad de ser transversales al situarse a un extremo del tablero pactando con IU o recientemente al posicionarse del lado de fuerzas independentistas, cuyo principal objetivo es destruir el proyecto común de España, basado en las libertades, la igualdad y la solidaridad entre territorios.
CIUDADANOS, SERIAS OPCIONES DE GANAR LAS PRÓXIMAS GENERALES
Por su parte Ciudadanos, la formación política liderada por Albert Rivera, ha logrado convertirse en una fuerza transversal y con capacidad para poder mantener este elemento en el largo plazo. El ejemplo más claro es el histórico triunfo conseguido en Cataluña, logrando batir en votos y en escaños a 30 años de nacionalismo en Cataluña.
A esto hay que sumar la oposición frontal a que España como proyecto común y de igualdad, continúe accediendo a los chantajes nacionalistas, ya sea de vascos o de catalanes. Aquí el ejemplo lo tenemos en la oposición nítida y al mismo tiempo valiente de continuar con la injusticia que supone el cupo vasco para el resto de territorios.
Además Ciudadanos se ha mostrado como una formación regeneracionista en la lucha contra la corrupción y reformista de las instituciones españolas. También ha sido capaz en los diferentes niveles, de llegar a acuerdos con fuerzas de diferentes espectros ideológicos como el PP o el PSOE.
Con todo esto Ciudadanos y su capacidad para ser transversal tomando lo bueno de los espectros ideológicos de la derecha y de la izquierda, se sitúa en una excelente posición para cosechar un muy amplio respaldo de la ciudadanía, y poder ser primera fuerza política en unas elecciones generales.