Aunque siempre se ha caracterizado por ser una mujer muy formal, prudente y reservada en cuanto a su vida privada, Emma García, desde que participa como presentadora del programa 'Viva la vida', en algunas ocasiones suele revelar algunos detalles de su cotidianidad, dejando un poco de que hablar a la prensa rosa.
El pasado sábado los colaboradores del citado programa tertuliaban acerca de cómo se ha estado llevando la abstinencia sexual. Entre ellos, Suso quien se encuentra cumpliendo su asilamiento solo en Madrid, confesaba no tener ningún tipo de apetito.
Ante la confesión del colaborador, Emma García se fue de bruces y ha explicado los cambios que han sufrido su día a día desde el inicio del confinamiento: "Los primeros días estaba tan preocupada que no tenía ganas", apuntaba García.
Luego, al parecer sus preocupaciones se han alejado, pues la presentadora ahora asegura sentirse más satisfecha, dejando caer una contundente afirmación: "Ahora ha llegado un momento que me he venido arriba".
No obstante, asegura que al llegar a casa de trabajar, sigue al pie de la letra algunas normas para evitar un posible contagio hacia su hija o su marido: "Llego a casa y me despeloto”, declaró la presentadora, “No me tocan mucho, me mandan directamente a la ducha", comentaba salpicándole un toque de humor a su intervención.