Jorge Javier Vázquez humilló a las ‘Azúcar Moreno’ muy en su línea, tras el abandono ‘injustificado’ y no esperado de las cantantes, amenazándolas con no volver a pisar un plató y casi echándoles una maldición gitana.
Las hermanas asentían pidiendo perdón y se mostraban extrañamente comedidas ante el aluvión de reproches que el presentador desgranaba, impidiendo además el aplauso del público, para que todo quedara mucho más dramático. ¡Como nos gusta un drama en este país!
Ya se sabe el porqué del cabreo de la productora y de la cúpula de Mediaset y es que al parecer y según Joaquín Prat primero, confirmado luego por Diego Arrabal; las Salazar pidieron unas semanas de adelanto para hacer frente a problemas económicos, justamente las semanas que han estado en el reality.
Así que pasado ese tiempo y viendo que esta edición se mueve al ritmo que marca Isabel Pantoja (a la que por lo visto ya no quieren ver ni en pintura, porque en el regreso a España junto a Loli Álvarez la pusieron de hoja de perejil, o sea, verde) decidieron que ellas cobrar ya habían cobrado y dijeron, adiós buenas.
El asunto de la penalización no existe y fue Lucia Etxevarria, la escritora, que estuvo en otro reality y que también abandonó, la que lo dijo bien claro, la cláusula no es legal y por lo tanto la productora no puede llevarla a cabo, lo que si puede hacer es no pagar las semanas que el que abandona haya concursado.
Pues miren ustedes si las ‘Ázúcar Moreno’ son listas que las cobraron por adelantado, por lo que supuestamente solo han tenido que abonar el billete de avión para su regreso y ahora les esperan conciertos y una gira con un caché más elevado.
De ahí que Jorge Javier las llamara trileras, pero señores, es que entre trileros anda el juego. Sabemos que Pantoja tiene firmada su fecha de caducidad en el concurso, por lo que ahora no nos vendan su marcha como inesperada, que no cuela.
Por eso es indignante que ayer Jordi hiciese el paripé de hacerla quedarse hasta el jueves, asegurándole que la audiencia multitudinaria de fans que tiene en el mundo no la van a expulsar, que es lo que ella en su orgullo máximo no puede consentir, que la expulsen.
Con esta jugada, Telecinco se asegura cuatro días más de llamadas y unos sustanciosos ingresos que acabarán de redondear lo mucho que llevan ya ingresado con la participación de esta señora en el reality.
Ella se irá, pero no expulsada y de los tres nominados que quedan es probable que la perjudicada sea Chelo García Cortés, porque si expulsan a Albert o a Carlos Lozano que además de grandes supervivientes, tienen a sus compañeros a favor, descabezan totalmente el concurso.
Vamos a ver quien se salva mañana y a lo mejor hasta nos reímos o nos indignamos, que todo puede pasar.
Violeta y su corte mangas ¿A Jordi González o a la audiencia?
Esta señorita es un compendio de pasotismo, mala educación y tontería máxima, lo llevamos viendo y sufriendo tanto los espectadores como los que nos dedicamos a comentar el reality.
Se lanzó a la piscina con Fabio, esperando una ‘carpeta’ que no ha llegado a consolidarse y del por qué no ha sucedido lo que parecía inevitable, se podría hablar mucho, pero lo vamos a dejar en suspenso.
Violeta Mangriñán que no es tan tonta como parece, ha empezado a darse cuenta de que lo suyo con Fabio no va a ir a más, ni dentro ni fuera de los Cayos Cochinos y comienza a sentirse ridícula.
El problema es que ella quiere tener protagonismo como sea, pensando que así se mantendrá más tiempo en Honduras y si Fabio no le da juego pues se monta un desafío al capitán Morgan, que ya hay que ser descerebrada, para no pensar en que logicamente habría consecuencias.
Y las hubo, la organización no iba a dejar pasar el desafío y abrió el televoto para que la audiencia decidiese si quería separarla de Fabio y enviarla con Albert a la playa abandonada y los votantes que por lo visto en un 78% no le tienen ninguna querencia a esta señorita, decidieron que lo suyo con Fabio quedara en stand by.
Violeta lloraba y lloraba y no quería responder a las preguntas de Jordi, que le dijo que lo de su traslado era cosa de la audiencia y ahí llegó el corte de mangas, que se podría entender que iba para Jordi, pero que pienso sinceramente que en realidad fue para la audienci.
En cualquier caso, su comportamiento hará que salga expulsada en cuanto la nominen, porque no creo que la organización vaya a echarla disciplinariamente, para que no coincida con la salida de Isabel Pantoja.