Hemos asistido al comienzo de las hostilidades de Kiko Matamoros hacia Makoke, entrando con dureza en directo en Sábado Deluxe para mostrar su menosprecio a la mujer con la que ha convivido durante 20 años y con la que tiene una hija y no solo a ella, también al hijo del anterior matrimonio de su ex mujer, con quien comenzó la convivencia cuando este contaba 4 años y a quien ahora recrimina haber mantenido hasta que se ha independizado, algo totalmente fuera de lugar y que no dice nada bueno a su favor.
Le hemos visto hacer el ridículo más absoluto cuando tras flirtear con Sofía Suescun, lo que ella también propiciaba, decía tener una ilusión y querer una relación más íntima y ella le daba una patada en público dejando en evidencia que los 40 años que los separan son insalvables y que estaba ya cansada de sus avances.
No cesa de pregonarlo a diestro y siniestro, a Kiko le gustan jovencitas y sus 62 años no son ningún impedimento para intentar ligar en discotecas o en Instagram. Lo que pasa es que tanto Instagram como whatsapp tienen mucho peligro y Matamoros que está desatado y en caída libre, no ha medido bien las consecuencias que ahora lo dejan en evidencia.
Las fotos de la vergüenza
Fue Gustavo González el encargado de desvelar que Matamoros: "está cometiendo un error detrás de otro". Refiriéndose a ese interés desmesurado de ligar por Instagram: "Tiene unas conversaciones brutales que al final nos llegan a nosotros. Se manda fotos muy subidas de tono".
Las fotos estaban en el teléfono de Gustavo y los colaboradores pudieron verlas. Paz Padilla no pudo reprimir un grito: "¡Uy! Este va al grano, como los adolescentes. ¡Dios mío de mi alma! Por favor, traedme un Valium". Kiko Hernández, apuntó a la posibilidad de que no fuera Matamoros ya que lo único que no se le veía era la cara, pero tuvo que rendirse ante los tatuajes y el reloj que no dejaban lugar a dudas. El colaborador se mostraba como Adán en el paraíso antes de comerse la manzana.
Paz Padilla remataba: "Está ligero, pero activo. Alegre, como que se alegra de verte", vamos que Kiko no solo le había mandado a la joven de turno su foto en cueros, sino que además había izado la bandera. A la foto le acompaña una conversación de alto voltaje y de una grosería extrema que no podemos reproducir por el sonrojo que nos causa.
La joven en cuestión ha vendido las fotos ¿La veremos también en plató? Matamoros está muy alterado e incluso según Gustavo González, el pasado fin de semana parece que se desmayó durante un bolo, según Kiko por una bajada de azúcar, pero los dueños de la discoteca estuvieron a punto de llamar a una ambulancia y quedaron preocupados por su salud.