Al darse cuenta de que la amenaza para Konoha y el mundo ninja era diferente de todo lo que habían enfrentado antes. El Hokage y Sasuke liberaron rápidamente todo su poder. Liberando al Zorro de nueve colas y al Susano para intentar derribar al representante de Otstusuki.
Desafortunadamente para Naruto y Sasuke, parece que su "modo bestia" no fue suficiente. Sin embargo, la batalla total del trío es una de las mejores peleas de ninjas que hemos visto hasta ahora en la franquicia.
Jiren es difícil de superar
Tanto Naruto como Sasuke comenzaron la pelea desatando sus formas finales, pero parece que incluso eso no pueden causar ningún daño a Jigen. El villano del arco narrativo actual y el líder Kara, logra romper la armadura viviente de Sasuke. Pero se sorprende cuando cae sujeto a otro as en la manga de Uchiha en la forma de su Rinnegan. La técnica del ojo es capaz de distorsionar la realidad que los rodea, pero incluso esto no es suficiente para mantener a Jigen abajo, ya que el antagonista logra sacar a Naruto con bastante facilidad en su forma de zorro.
La batalla no se detuvo allí, porque incluso sin sus "formas finales", tanto Naruto como Sasuke son una fuerza a tener en cuenta. Naruto intenta golpear a Jigen con su movimiento distintivo, el Rasengan, mientras que Sasuke confía en su espada unida a su costado, sin ser efectivos.
En un último intento desesperado, Sasuke lanza el Amaterasu, una llama negra que consume cualquier objetivo al que apunta. Desafortunadamente, Jigen logra cancelar la técnica y absorberla en su ser.
El capítulo termina con Sasuke que logra escapar mientras Naruto está sellado, con Jigen victorioso. Con la idea de que puede ser necesario elegir un nuevo Hokage, está claro que las repercusiones de esta batalla tendrán graves consecuencias.