No solo errores en el último capítulo de Dragon Ball Super. El manga ha producido momentos interesantes y alimento para el pensamiento dentro del nuevo arco narrativo dedicado a los villanos de Moro, prestando especial atención a los dos protagonistas Saiyajin, Goku y Vegeta.
El nuevo enemigo de Dragon Ball Super está demostrando ser un enemigo extremadamente difícil para nuestros héroes. Y es gracias a esta nueva dificultad que un breve y conmovedor momento hizo que nuestros corazones se fundieran por un momento.
Goku y Vegeta
Goku y Vegeta, ya terriblemente agotados después de la dura batalla contra Moro, deben evitar a toda costa que el hechicero tome posesión de la última esfera del dragón, y antes de prepararse para la batalla intercambian una secuencia de latidos conmovedores. El Príncipe de los Saiyajin, un poco antes, todavía estaba preocupado si los namkianos aún sentían una especie de resentimiento hacia él, y conscientes de su pasado y sus pecados, le pide a Goku, en caso de que sobreviva, que exprese su deseo en el contra el planeta Namek y devolverlo a su antigua gloria.
Después de un momento de vacilación, nuestro héroe consiente en la solicitud, y después de mirar a su rival, una sonrisa melancólica llena los rostros de los protagonistas, listos para la batalla final.
El último capítulo del manga también ha visto el regreso de Majin Boo para luchar contra Moro, mostrando toda la habilidad del hombre rosa para poner al enemigo en dificultad gracias a sus extraordinarios poderes. ¿Cómo terminará?
