La Guardia Civil detenía a un hombre el pasado viernes acusado de acabar con la vida de Paz Fernández, una de las tres mujeres desaparecidas en Asturias en menos de un mes. Javier Ledo, de 42 años, fue una de las últimas personas que fue vista con la asturiana horas antes de su desaparición y posterior muerte.
Tras rastrear el móvil del hombre, se han encontrado unos audios de WhatsApp que la fallecida mandó al hombre. El primero, mandado el mismo martes 13 de febrero en torno a las nueve de la noche, dice lo siguiente: “Javi, he quedado con un tío, me dijo que me conocía y yo no lo conocía de nada. Vaya mal rollo”. Según ella, le pareció “un chungo”. Una de las aficiones de la mujer era viajar en caravana, la cual se le había estropeado el motor. Fue por ello que, según el detenido, aceptó pagar unos 800 euros para que un lugareño de Navia se la arreglara. Sin embargo, ese dinero nunca llegó a pagarse, porque Paz se lo había gastado en las máquinas tragaperras.
Un segundo mensaje, mandado a las 21:42, decía lo siguiente: “Vaya la que hice, joder, vaya la que monté, vaya la que hice”. Ledo, que le aseguró que no se preocupara porque él le daría el dinero suficiente para arreglarlo, ha confesado que la invitó a cenar, pero nunca llegó ese mensaje al móvil de Paz y, por tanto, la mujer tampoco llegó a la cita. A las diez de la noche el hombre intentó ponerse en contacto con su “amiga”, pero nunca más supo de ella. Por último, explicaba que por aquella época tenía una escayola, que se tumbó en la cama para esperarla y que se quedó dormido. Asegura que antes de eso la volvió a llamar.
El cuerpo de Paz Fernández aparecía el pasado 6 de marzo en una zona poco accesible del embalse de Arbón, una parte del río Navia. Tras realizar la autopsia al cuerpo, se llegó a la conclusión de que murió asesinada violentamente.