Un salón con una chimenea, un piso con un cassette para poder sentarse y disfrutar de las tardes de domingo al abrigo de la lumbre o incluso una estufa, esas son las tendencias de moda para las olas de frío que vienen acorralando la Península estos últimos meses. Y de eso saben bastante los Artesanos del fuego.
Tendencia o no, la lumbre siempre ha hecho hogar. Antiguamente las historias se contaban alrededor de una fogata.
De hecho, nuestra evolución social y cultural está íntimamente ligada a este elemento, algo que quedó demostrado gracias a estudios como el de Pollo Wiessner, quien demostró que este tipo de relatos alrededor de las llamas propiciaron la imaginación, armonía, igualdad e incluso la conciencia social.
La intimidad que proporcionan las llamas ha sido siempre referente para el romanticismo, pero cada vez más, en las modernas viviendas, se tiende a dejar un rincón que vuelva a simbolizar esa unión con los elementos a través de la instalación de aparatos que invitan al recogimiento familiar, a las tertulias y al relax.
Cinco beneficios de tener fuego en casa
“Todas las viviendas pueden tener su propio fuego” sentencian los Artesanos del Fuego. Y es cierto, gracias a las muchas opciones de chimenea, estufa, pellet o incluso gas, cualquier tipo de vivienda puede disfrutar de su propio rincón del fuego.
Pero ¿cuáles son los beneficios de contar con este espacio decorativo?
1. Decoración: obviamente la estética es lo primero que se va a valorar. Aportar a una estancia un rincón con llamas ofrece la sensación de hogar, de calor, de recogimiento y de conversación. Nada más elegante que decorar alrededor de este elemento para conseguir un rincón único.
2. Ahorro energético: el calor que desprenden este tipo de instalaciones, cuando están bien hechas, ayuda al ahorro energético ya que la capacidad calorífica supera cualquier otra.
3. Tiempo de calidad en familia: se ha demostrado en estudios como el que se mencionaba previamente que las conversaciones alrededor del fuego beneficiaban la conexión. Nada como dedicar un rato en familia alrededor del fuego para inspirar la relación y conversar sin prisas.
4. Rincón anti estrés: dejar reposar la mirada en las llamas es uno de los relajantes más potentes que puede haber. Desconectar, dejar la mente en blanco y quitar todo lo acumulado durante el día es una de las mejores terapias que puedes regalar a diario en tu vivienda. ¿Sabes que muchas de las grandes ideas se generan en ese momento de desconexión?
5. Plan B: más allá de ahorrar energéticamente, si un día no hay luz en casa, no hay problema, no se quedará congelada. Apostar por la instalación profesional de una de las versiones disponibles te puede sacar de un apuro.