Las críticas parecen unánimes: Andalucía se ha desplegado a lo grande en el pabellón número 5 de Fitur, la Feria Internacional de Turismo que esta mañana ha abierto sus puestas, hasta el 21. Y lo ha hecho con calidad y buen gusto.
Los 5.300 metros cuadrados de Andalucía, muestran a Almería, Cádiz, Córdoba, Granada, Huelva, Jaén, Málaga y Sevilla, donde habitan 8,5 millones de personas, en el interior y sus costas; territorios que a nadie dejan indiferente.
Buenas cifras, ¿buen empleo?
Las buenas cifras que la industria del turismo arroja, deben tener su reflejo en un aumento del empleo y de sus condiciones, para superar la frontera de los salarios precarios, la contratación temporal y estacional, y la falsedad de la falta de formación.
De lo contrario, por más visitantes que reciban con buen hacer, gracia y salero; buena tierra, mejor cocina, playas, sol y diversión; pues por más que se les dé a los de fuera, si no revierte en la población autóctona y estable, el fracaso social está asegurado.
Escaparate
El escaparate internacional que es cada edición de Fitur, trata de superarse a sí mismo con puestas en escena vibrantes, elegantes e innovadoras, donde se subraya la calidad de producto español. Ahora, solo falta que los que vienen, que lo aprecian sobremanera, apuesten por un turismo sostenible, ese que dice hay que amparar a la población trabajadora.