La Fundación Benjamín Mehnert (FBM) está desbordada, como SOS Galgos, 112 Galgos y todas las ONG que recogen, auxilian, cuidan y ofrecen en adopción a miles de galgos todos los años.
La voz de alarma, en este caso de la FBM llega en un twuit: “Ayer os comentábamos la llegada de 20 galgos a nuestras instalaciones, pues a la hora de irnos a casa habían llegado otros 23; 43 en total y algunos en un estado de desnutrición extremo”.
Días después la llamada de atención es: “Hola a todos, esta temporada de caza parece no tener fin. Estamos desbordados, con las instalaciones al 150% de nuestras posibilidades; la temporada de caza suele acabar en Febrero”.
¿2 de galgos?
Las cifras abocan hacia un número cuasi infinito de galgos. En una entrevista magnífica de PabloMM, en enfoques.es, Abraham Corpa, Portavoz de la Presidencia de la Real Federación Española de Caza y Presidente de la Plataforma en Defensa de la Caza con Galgos; Abraham ofrece algunos datos.
En España hay 200 criadores de galgos con licencia federativa para caza menor con esta raza, que “pueden tener los galgos que quieran”, afirma en la entrevista a PabloMM. Y continúa, sobre una posible limitación del número de galgos que se pueden tener: “no es lo mismo limitarlo a 20 galgos que a tres o a cuatro. Con tres o cuatro, si no te sale alguno bueno, ¿cómo crías? Nadie es nadie para decir cuántos animales hay que tener pero yo soy partidario de criar menos y seleccionar más”.
Controlar a 200 no parece tarea fácil y si el número medio de galgos, por licencia, es de, por ejemplo, 10, ¿es posible que en España hoy haya más de 2 de ejemplares de esta raza?
‘Los malos’
Cuando Abraham Corpa dice que “con tres o cuatro, si no te sale alguno bueno ¿cómo crías?”, abre la cuestión de, ¿qué pasa con los ‘malos’?, ¿tal vez sean esos que, una vez ‘probados’ y sin chip, aparecen (¿o desaparecen?), y acaban en las ONG, y los más suertudos, en familias que les adoptan?
Para los cazadores, el galgo es un animal que sirve para cazar y, para ello, entrena 10 meses al año, en sesiones de mañana y tarde, y descansa 2 meses al año. Es probable que los ‘malos’ sean los que cazan poco, tal vez, porque no corren al ritmo exigido para alcanzar a la pieza.
Descontroles
Si se puede criar un número abierto de ejemplares, ¿cómo se puede controlar la cría del galgo?, ¿hay agentes del SEPRONNA suficientes en el país para inspeccionar las instalaciones donde crían y viven este tipo de perros? Y ¿en qué condiciones se pueden mantener a 10 o 20 galgos?
Hay un dato que ofrece Corpa, cuanto menos, interesante: en 2016, en España se abandonaron 56 galgos: “datos oficiales del Seprona”.