El Gobierno reformará la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ) el jueves 11 de marzo si no alcanza antes un acuerdo sobre la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) antes de dicha fecha. Con esta modificación en la legislación, el órgano rector de la Justicia no podrá nombrar a nuevos miembros de la estructura judicial una vez que esté en funciones al expirar su mandato. PSOE y Unidas Podemos ya tienen asegurados los votos con sus socios de investidura para reformar dicha ley en el Congreso de los Diputados, del cual saldrá dirección el Senado para que la reforma de ley sea aprobada definitivamente en el Senado.
Por ahora, se postula como lejano un hipotético acercamiento entre el PSOE y el PP que impida que se renueve el órgano de gobierno de los jueces. No obstante, nunca es descartable un acercamiento entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; y el líder de la oposición y presidente del PP, Pablo Casado, quienes deberían tomar las riendas de la negociación y desbloquear una situación anómala en democracia que la Constitución les exige renovar.
"Reclamamos al PP que cumpla con su deber institucional y constitucional y que lo haga sin vetos ni sectarismo. El CGPJ debe ser renovado cuanto antes para aumentar, aún más, la calidad democrática de España", presionó el secretario general del Grupo Socialista en el Congreso de los Diputados, Rafael Simancas. La mano derecha de Adriana Lastra, una de las mujeres del PSOE más cercanas al presidente del Gobierno, acusó al PP de estar "acomplejado por los ultras de Vox" y les invitó a "actuar por España" con el desbloqueo de la renovación del órgano de gobierno de los jueces.
"Si alguien lo está viendo como una especie de chantaje o de presión hacia el segundo partido más importante de España, se equivoca de grupo al que chantajear", respondió, minutos después, la portavoz de los populares en la Cámara Baja, Cuca Gamarra. "Una cosa es la responsabilidad en la renovación de un órgano bajo las normas establecidas con unas mayorías cualificadas para proteger la independencia de ese órgano y otra muy distinta la tramitación de una reforma que afecta a la ley orgánica que afecta a esas normas", apostilló.
Unidas Podemos quiere más
El partido del vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, quiere más. La formación morada no se conforma simplemente conque el CGPJ tenga limitadas sus funciones una vez caduque su mandato, sino que quiere rebajar las mayorías parlamentarias necesarias para aprobar un nuevo órgano de gobierno de los jueces. Actualmente, la LOPJ exige una mayoría de tres quintos de sendas cámaras para proceder a la renovación. Podemos aprueba que, en segunda votación, se rebaje dicha cifra a la mayoría absoluta del Congreso de los Diputados, 176 diputados. "Se acabaron los tiempos de un Poder Judicial bajo las prioridades y presiones del bipartidismo", celebró el secretario primero de la Mesa del Congreso, Gerardo Pisarello, diputado del Grupo Parlamentario de Unidas Podemos. Sin embargo, sus socios de Gobierno no son favorables a esta reforma aunque el PSOE la presentó conjuntamente con los morados en octubre.