La Reina sería el elemento discordante de Casa Real según indica una teoría conspiratoria de los monarquicos que está moviéndose a través de redes y que ponen a la ‘plebeya Letizia’ en la palestra tras el exilio de Juan Carlos I. La buena relación de Felipe VI y su mujer con el Gobierno de Pedro Sánchez está escociendo bastante en los círculos conservadores.
El preocupante silencio de la reina de España
A pesar de que Doña Letizia no ha realizado ningún pronunciamiento, la derecha mas cavernaria ha relacionado su entrada en Casa Real como el detonante de los problemas familiares, internos y externos. La controversia partió del polémico twitter Eugenio D'ors: ¿Que la monarquía empezó a desvanecerse en el momento que se casó con una plebeya progre se puede decir?».
Una teoría conspiranoica que poco a poco empezó a tener repercusión cuando un gran número de usuarios comentaba y retwitteaba sin control al estilo de los bots de VOX. En menos de una hora, el desarrollo del argumento señalaba a Doña Letizia como un ‘Caballo de Troya’ para explotar a la Casa Real de manera interna hasta que era una ‘infiltrada’ de una parte republicana del CNI. Por supuesto, no faltó quien la enlazó con la red de comisiones de la que forma parte Juan Carlos I. Y es que el gobierno de coalición para algunos influencers de la caverna tendría un pacto secreto con la que fuera periodista de TVE.
La tensión de Letizia con Casa Real
Tirando de hemeroteca, las redes han rememorado el rol de la reina Letizia en el ‘caso Noos’, ocasionando una lejanía total tanto con la infanta Cristina como con su esposo Iñaki Urdangarín. El Rey tuvo que tomar brutales medidas al respecto y eliminar de inmediato el título de Duques de Palma a su hija y yerno, a pesar de que en el pasado había sido cómplices para esconder la historia de amor de Felipe y Letizia ante la gente. Hay quien dice además que Iñaki Urdangarín fue el encargado de elegir y comprar el anillo que portaría la reina en su boda, mostrando que la relación era de mucha hermandad. l
También han corrido una gran polvareda acerca de la unión de Letizia con eméritos, que ha ido desde la negativa radical del Rey Emérito a permitir la boda hasta el lio con Doña Sofía en la Catedral de Palma, después de que a la Reina no le pareciera buena idea que las infantas se realizasen una fotografía con su abuela.
Las teorías conspiratorias llegan justamente cuando Felipe VI está más cercano que nunca a Pedro Sánchez, quien mostró su respeto a la decisión del exilio de Juan Carlos I y recordó que se debe juzgar a las personas por sus actos, pero no a las instituciones.