Todos los partidos independentistas se unieron para leer un comunicado en contra de la Monarquía, luego dejaron plantado al Rey y se fueron del acto de apertura de la legislatura.
Para lograr la investidura el actual Jefe de Gobierno contó con el apoyo de los partidos independentistas (ERC, Bildu, BNG) quienes luego se unieron a Junts per Catalunya y la CUP para realizar un ataque al Rey y a la Institución que es representada por él.
El ataque que sufrió el Rey estuvo lleno de una serie de descalificaciones y reclamos que los llevaron a decir cosas como que el Rey es franquista o que tiene un proyecto antidemocrático que quiere imponer al país de forma autoritaria.
Para los independentistas la unidad del país es autoritarismo
Cuando se estaba debatiendo la investidura de Pedro Sánchez fue uno de los puntos que causaron fuertes enfrentamientos, sin embargo los aliados en el parlamento del Presidente del Gobierno insisten en que los llamados a la unidad de España que son realizados por la Monarquía, son una muestra de autoritarismo y que atentan contra las libertades de los ciudadanos.
Para ellos la Institución que representa el Rey es heredada del franquismo, y que por lo tanto pretende imponer la unidad de España de forma autoritaria al igual que las leyes vigentes en el país, negando los derechos que tienen Cataluña, el País Vasco y Galicia de seguir un camino aparte.
El autoritarismo del Rey contradice totalmente los principios democráticos que siempre han esgrimido en sus actuaciones los partidos independentistas, según han manifestado en el comunicado leído en el acto realizado en el Congreso.
Afirman que el Rey no los representa
Estos partidos independentistas afirman que ellos si tienen un proyecto democrático enmarcado en el respeto de la libertad y consideran que para poder conseguir concretar ese proyecto, el Rey no es el interlocutor indicado, ya que según sus ideas, el Rey no tiene legitimidad ni ejerce ninguna función política.
Manifiestan que los partidos independentistas tienen altos ideales en temas como la democracia, la igualdad y la libertad, valores que no tiene la Monarquía y que por lo tanto el único modo de instaurar esos valores es realizando una ruptura total con la figura de la Monarquía y todo lo que representa.
Lanzan un desafío a la Monarquía
A partir de todo lo planteado es que deciden lanzar un desafío al Rey, exigiéndole que deje de ejercer un papel tutelar en los ciudadanos y sobre el gobierno, que es elegido por voluntad popular.
Exigen que se respete la voluntad popular para poder vivir en una auténtica democracia, siempre y cuando la ciudadanía haya comprendido quienes son los verdaderos demócratas, que velaran por la libertad y la democracia, es decir, la independencia de sus regiones.
Plantean que una vez que haya cesado la tutela del Rey, los ciudadanos podrán elegir sin temor el destino de sus regiones y de España en general, guiados por los valores democráticos que ellos representan.
