El presidente de Cataluña, Quim Torra, ha presentado un recurso ante el Tribunal Supremo en el que solicita a los magistrados poder mantener el acta de diputado hasta que la sentencia a año y medio de inhabilitación sea firme. Además, el sucesor de Carles Puigdemont ha criticado que esta decisión judicial es una “clara intencionalidad política” para “apartar ilegal e ilegítimamente de los cargos que ostenta democráticamente”.
El presidente catalán ha asegurado que la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TJSC) “incurre en una vulneración manifiesta” y que su decisión “no constituye a ningún efecto una resolución razonada, motivada, fundada en derecho y congruente con las pretensiones deducidas en su día”. En un recurso de más de 300 páginas, el abogado de Torra defiende que los magistrados “debieron haberse abstenido de participar en el expediente administrativo del que emana la querella presentada”.
Una maniobra política
La intención de este manifiesto presentado ante la Justicia es el de dejar latente que todo lo decidido por el Tribunal Supremo es una maniobra política para retirar a Torra de la vida política de Cataluña. Mañana, el presidente catalán recibirá a Pedro Sánchez en el Palau de la Generalitat y tratará que el Gobierno se muestre a favor de mantener a Torra como un interlocutor válido para encauzar el “conflicto político” que se vive en Cataluña.