Muchos problemas de salud que tienen algunas personas están relacionados con un mal funcionamiento en los procesos digestivos. Esto puede deberse a varias razones, tales como una alimentación inadecuada, estrés, cambios hormonales, ingesta de medicamentos, enfermedades, entre otras que afectan principalmente a la flora intestinal, la cual cumple funciones vitales para la salud general del ser humano.
Y es que la flora intestinal, al estar compuesta por una serie de microorganismos vivientes que se alojan en el intestino, puede alterarse fácilmente si se genera un desequilibrio en las condiciones de su hábitat, motivo por el cual, es fundamental cuidar de la misma. En este sentido, hablaremos sobre los beneficios que tienen los probióticos en la salud estomacal.
Qué son los probióticos y dónde se encuentran
De acuerdo a un concepto establecido por la Organización Mundial de la Salud (OMS), se puede decir que los probióticos son microorganismos activos que al ser administrados en cantidades correctas, tienen la capacidad de ejercer un efecto favorable en la salud de la persona que lo consume.
Los mismos se encuentran presentes en alimentos como el yogur natural, el yogur de fermento de soya o el kéfir, bien sea de agua, leche o té. Sin embargo, una forma fácil y más segura de consumir las cantidades adecuadas es al comprar productos probióticos, los cuales se hallan en el mercado en presentación de sobres o como cápsulas. Éstos se crean a partir de cepas vivientes de bacterias específicas que hacen bien al organismo.
Entonces, cuando se tengan síntomas como pesadez estomacal, gases o no se haya realizado una digestión adecuada, es recomendable el uso de estos productos. Asimismo, se pueden usar cuando el sistema inmunológico requiera ser reforzado. Pero, es especialmente recomendado su uso cuando por alguna enfermedad o proceso infeccioso, se hayan ingerido antibióticos que eliminan la flora bacteriana como efecto secundario.
Cómo se consumen los suplementos probióticos
Debido a que los suplementos vienen en cápsulas o sobres con polvos solubles, su consumo es muy sencillo, ya que los mismos se deben tomar con suficiente líquido previo o posterior a una comida. De este modo, los alimentos colaborarán con las bacterias para que éstas sobrevivan al ácido gástrico y así puedan llegar al intestino, donde podrán multiplicarse con facilidad.
Beneficios de los probióticos en la salud
El consumo de probióticos tiene efectos positivos demostrados en la salud general del ser humano, y cuanto más alta sea la variedad de microorganismos y bacterias en los suplementos, la facilidad para lograr un equilibrio y desarrollo de la flora intestinal sana, mejor será.
En este sentido, se tiene que los beneficios más destacados de los probióticos se pueden resumir en los siguientes:
– Ayudan a combatir la diabetes y la obesidad, al corregir el metabolismo de las grasas y la glucosa.
– Colaboran en el bienestar de las emociones, esto se debe a que ayudan a reducir los niveles de estrés, facilitan la relajación y evitan que ocurran episodios depresivos o de ansiedad.
– Protegen el hígado y reparan los daños que éste puede sufrir antes de que deriven en enfermedades.
– Son buenos para prevenir resfriados o minimizar los síntomas de la gripe, debido a que ayudan a fortalecer el sistema inmunitario.
– Atacan los efectos secundarios que producen los antibióticos, los cuales, al combatir las bacterias dañinas también eliminan las buenas del intestino, dejándolo así vulnerable y propenso a las molestias y desequilibrios bacterianos.
– Mejora los síntomas del intestino irritable, ya que disminuye los dolores, la hinchazón y las flatulencias.
Recomendaciones
Para finalizar, es importante saber que aunque los suplementos probióticos tienen las dosis adecuada de estos elementos, al incluir en la dieta diaria alimentos naturales que contengan probióticos, se estarán aprovechando de otras propiedades y beneficios que éstos igualmente aportan a la salud.