El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha hecho esta tarde un nuevo gesto a Unidas Podemos para intentar caminar conjuntamente a un gobierno de cooperación. El secretario general del PSOE ha llamado telefónicamente a Pablo Iglesias en torno a las cuatro de la tarde para "negociar el programa", pero él mismo ha comunicado minutos después que no se ha llegado a un consenso. "Seguiremos intentándolo", ha asegurado el líder del Ejecutivo.
He llamado a @Pablo_Iglesias_ para negociar primero el programa y, después, la composición del Gobierno. Debemos hablar de contenidos y conocer el grado de consenso.
Lamentablemente, ha rechazado la propuesta. Seguiremos intentándolo.— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) 11 de julio de 2019
El día de hoy, sin embargo, ha sido un cruce de acusaciones y mensajes en los medios de comunicación de ambos líderes. Sánchez ha sido el primero en Los desayunos de TVE, advirtiendo de la llamada que se produciría a primera hora de la tarde para "hablar de medidas, pero no de ministerios". Iglesias ha respondido a esta afirmación en Al rojo vivo, acusando a La Moncloa de anunciar sus decisiones por los medios de comunicación antes que a los detinatarios de dichos mensajes. "Lo importante es volver al comienzo, al punto de arranque. Rebobinar", ha añadido.
Sánchez ha advertido de lo inviable de un gobierno de coalición porque "caería por su propio peso por cuestiones de Estado como el de Cataluña". "Hablan de presos políticos y el PSOE no, decimos que hay políticos presos", ha añadido Sánchez. Sin embargo, el que fuera su socio prioritario la pasada legislatura ha advertido que Cataluña no sería una línea roja en el futuro ejecutivo, una afirmación que parece no convencer al secretario general de los socialistas. Además, Sánchez ha lanzado el siguiente mensaje: "¿Unidas Podemos va a apoyar al Gobierno de España en la aplicación hipotética, que yo no deseo, del artículo 155 de la Constitución?".
Y tras la llamada, los mensajes no han cesado. La Moncloa ha asegurado que Sánchez contempla "todos los escenarios posibles" tras esta llamada. El PSOE ha acusado a Unidas Podemos de querer asientos, mientras que los morados han tachado al candidato a la Presidencia del Gobierno de "inmovilista" porque no quiere incluir a afines o miembros de Podemos en el Gobierno. Para el propio Iglesias, "los españoles eligen a sus representantes cuando votan, y eso tiene que verse reflejado en el Gobierno".