La portavoz autonómica catalana y consejera de la Presidencia, Elsa Artadi, ha tachado de "demanda ridícula" la pretensión de la Junta Electoral Central (JEC) de retirar los lazos y las "esteladas" de los edificios públicos dependientes del gobierno catalán durante el proceso electoral. El plazo de 48 horas otorgado por la JEC para la retirada de dichos símbolos ideológicos o partidistas expira hoy miércoles. Por otra parte, Artadi también afirmó que la asesoría jurídica de la Generalitat está trabajando en una "respuesta combativa" para no cumplir lo que dictamina la JEC.
La JEC considera que las instituciones políticas deben mantener la neutralidad política durante los procesos electorales, y en caso contrario, el Gobierno se asegurará de que el mandato se cumpla. Estas denuncias por "incumplimiento" de un acuerdo de la JEC han provocado que la líder de de Ciudadanos (C's) en Cataluña, Inés Arrimadas, responda: "Si Torra no los retira, se iniciará el procedimiento que viene después".
En caso de que se acuda a la JEC, Torra y los altos cargos de la Generalitat que tengan responsabilidades en edificios públicos dependientes del gobierno catalán, se expondrán a sanciones de entre 300 y 3 euros, tal y como indica la Ley Orgánica 5/1985, de 19 de Junio, del régimen electoral general (Loreg). Todo ello sin eximirse de dar explicaciones judiciales si la Fiscalía actuara en caso de apreciar desobediencia.
Un suceso similar ocurrió en 2015, cuando la alcadesa del pueblo barcelonés de Berga, Montse Venturós, se negó a retirar la bandera estelada del ayuntamiento durante las elecciones catalanas y generales de 2015 a pesar de habérselo requerido la Junta Electoral. Finalmente, Venturós acabó inhabilitada para el cargo en junio de 2018 por negarse a cumplir un acuerdo de la Junta Electoral.