El sindicato policial hace pública su repulsa ante lo que consideran descalificaciones a los funcionarios que actuaron, en la Universidad de Cádiz, en 2012, cuando un grupo de jóvenes irrumpieron en la sala donde el juez Fernando Grande-Marlaska, iba a impartir una conferencia. Entre los chavales y los policías se produjeron distintos rifirrafes, al negarse los primeros a identificarse ante los agentes.
Dos de los jóvenes implicados fueron arrestados y encausados. La sentencia absolutoria, que el Sindicato Unificado de Policía (SUP) subraya que acata, ha generado que esta organización envíe una queja al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), por los razonamientos que el juez expresa en la misma, tales como: “que la alteración grave del orden público se estima, en parte, provocada por la propia presencia y actuación de la Policía; que el operativo policial se excedió y extralimitó en el ejercicio de sus funciones al acceder al recinto universitario”.
El SUP explica que, “consideramos desacertado que en dicha sentencia se dirijan a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad graves imputaciones. Se ha de recalcar que esta Organización sindical no centra su atención en que, por el Juez, se afirme en su sentencia que la irrupción de los manifestantes sea ejercicio del derecho a la libertad de expresión, pero sí nos obliga a ejercer el derecho a la defensa de los funcionarios policiales”.