La construcción de espacios con el menor consumo energético posible, concepto abierto pero con estancias definidas, mayor preponderancia al área exterior de lo que estaba establecido, protagonismo en el diseño de las cocinas y los baños, inmuebles inteligentes, y mucho más, forman parte de las tendencias de arquitectura que ya llevan tiempo implantándose, pero que en esta década que recién comienza se van a afianzar.
La arquitectura se enfoca actualmente hacia la multifuncionalidad, dinamismo, innovación y flexibilidad, apostando fuertemente por elementos naturales y orgánicos en sintonía con la preservación del medioambiente dando como resultado una tendencia que se ha denominado “edificaciones verdes”, que se ha globalizado.
En tal sentido, al momento de pensar en la ejecución próxima de un proyecto de arquitectura a cualquier nivel residencial, comercial, industrial o sanitario, es vital considerar todo lo que ha sido la evolución en tendencias de diseño y estructuras, con el objetivo de que sea una construcción adecuada a los estándares actuales y sostenibles en el tiempo.
Para lograr esto es fundamental servirse de un equipo de profesionales con vasta experiencia y conocimientos, quienes trabajan en la creación de espacios que las personas realmente sientan propios y estén completamente adaptados a sus necesidades.
Un estudio de arquitectura ideal es la clave
Son muchos aspectos a considerar al momento de elegir un estudio de arquitectura que pueda plasmar en una obra lo que se tiene en mente, que sea un proyecto de vanguardia adaptado a los requerimientos propios, y a la vez, a los estándares que la modernidad demanda.
Existen empresas de gran prestigio en el país, pero bien vale resaltar el trabajo que viene realizando, por ejemplo, Aleph Arquitectos. Este estudio de arquitectos en Alicante es una referencia en la comunidad valenciana y alrededores. Entre los proyectos más destacados que tienen en su haber están los pisos Mascarat I, II y III y la Casa Giner-Oliver.
Este equipo de profesionales en arquitectura, ingeniería e infografía está especializado en obra nueva y rehabilitaciones o reformas, bien sea de viviendas unifamiliares, edificios, industria o comercio.
Para elegir un estudio de arquitectura es importante tener en cuenta algunos aspectos. En primer lugar hay que cerciorarse de que tenga experiencia, es éste uno de los más importantes puntos a favor; también es importante conocer los trabajos que ha realizado y las opiniones de varios clientes que haya tenido.
El trato personal es otro de los aspectos fundamentales, considerando que la ejecución de una obra tiene una duración entre 6 y 12 meses, y habrá un contacto constante que debe ser armonioso, cordial y atento en beneficio de la buena marcha del proyecto.
La solvencia económica de la empresa es también un aspecto a revisar, así como conocer con detalle los rangos de precios que maneja para, de inicio, tener alguna idea del presupuesto que se tendría que manejar. En este punto hay que recordar que la trayectoria y la garantía de calidad de servicio representan una inversión necesaria en este tipo de trabajos.
Un buen ejemplo de evolución: la arquitectura sanitaria
Dentro del amplio campo de la arquitectura hay una rama que es sumamente importante y necesaria, aunque no la más común en cuanto a demanda de trabajo constante: la arquitectura sanitaria.
Cuando se habla de arquitectura sanitaria, es decir, todo lo relacionado con la edificación de hospitales y centros de salud en general, viene a la mente un concepto tradicional de construcciones muy sobrias, con formas puras, nada ostentosas, espaciosas, con más luz artificial que natural, bastante cerradas y muy divididas en función a la cantidad de áreas diferentes que se deben atender en este tipo de recintos.
Con el paso del tiempo esta concepción se ha ido modernizando conforme se van dando los avances tecnológicos y médicos, añadiendo cada vez más funcionalidad a la par de elementos estéticos de vanguardia. Hoy se habla de centros de salud “verdes”, “hospitales inteligentes”, “arquitectura efímera”, estructuras modulares, entre otras nuevas acepciones, que además de tener en cuenta los procesos médicos y la norma, se enfoca en crear espacios innovadores que se traduzcan en ambientes amigables y experiencias agradables para todos.
Conceptos muy interesantes en torno a este tema se tocan en una entrevista a 2 arquitectas publicada recientemente, en la que ambas reflejan las nuevas maneras de concebir la arquitectura sanitaria, orientadas en la premisa de que “los hospitales no deben ser edificios que enferman, sino que ayuden a curar”.
Angela Müller y Marta Parra, integran el equipo Arquitectura de Maternidades, quienes se han planteado como proyecto la humanización en el diseño no sólo de las maternidades, sino en todas las áreas en las que se reciban pacientes, unidades de cuidados intensivos, urgencias, salud mental, geriatría y demás.
El objetivo que se han trazado es que los diseños realmente se traduzcan en entornos que generen confianza, paz e intimidad suficientes a los pacientes, siendo un ejemplo de utilidad, todo esto en el caso de las madres, quienes requieren ambientes agradables que ayuden a que la experiencia del parto sea positiva e inolvidable.
El concepto de edificio sanitario ha cambiado tanto que uno de los preceptos que se busca es que el paciente sienta que recibe atención médica de calidad, pero sin percibir estrictamente que se encuentra en un hospital o centro de salud.
Müller y Parra buscan conectar la naturaleza en todos sus proyectos, a través de la inclusión de espacios exteriores para el disfrute de familiares y pacientes, logrando una correcta fusión con los ambientes interiores y un uso adecuado de materiales saludables y sostenibles.
Esa conexión con la naturaleza también se logra con la incorporación de entornos con iluminación natural, a través de ventanales y vistas al exterior, combinadas con el uso de materiales y colores naturales.