Ya lo contábamos ayer, es joven, atrevido y además tiene algo en común con Rafael Nadal, esa capacidad de no venirse abajo por muy mal que le vaya el partido. Es así como pudo derrotar en la noche de ayer al manacorí y como en la madrugada del viernes al sábado en España hizo lo propio con Mannarino, el francés no se lo podía creer tras empezar el partido con un claro 6-2 y un Denis Shapovalov al que los nervios le estaban pasando factura ante su público y no le salía nada.
Tras el breve descanso después de perder la primera contienda, Shapovalov fue capaz de dar un paso al frente, no tan descarado como frente a Nadal, pero suficiente para apuntarse la segunda manga por 4-6 y afrontar el definitivo tercer set con todas las garantías.
Y es que ante su público y teniendo la ocasión de meterse en semifinales de un Master 1 de Montreal, la edad podía ser un problema pero no lo fue, el canadiense se fue creciendo con el paso del choque y eso que el set definitivo le trajo un break a favor pero inmediatamente Mannarino se lo devolvió, fue entonces cuando con 4-4 en el marcador, Shapovalov volvió a romper el saque de su rival y selló su pase a semis ganando su saque.
Tiene que mejorar su resto y sus subidas a la red, pero es insultantemente joven y sus cualidades son tantas que no es apresurado hablar de que en el mundo del tenis, emerge una nueva estrella, apunten su nombre, Denis Shapovalov.
