Jayson Granger lo ha dicho por activa y por pasiva, “Quiero jugar en la NBA“, bien es cierto que se ha dejado querer por Unicaja aún sabiendo que el club de los guindos nunca llegaría a las cifras que él reclama.
Unicaja parecía decidido a acabar con el culebrón del verano y “pasar” de Granger fichando a Marcelinho Huertas, pero el Baskonia a última hora se entrometió y cerró su fichaje. La situación es la siguiente, el base uruguayo está muy cerca de lograr su objetivo de jugar en la liga americana, por lo que Querejeta no ha querido dejar pasar la oportunidad de cerrar a Huertas y asegurarse así un base de nivel, aunque no cierra la puerta a la posibilidad de incorporar también a Granger si este finalmente no encuentra atractiva ninguna oferta de franquicia NBA.
Entre medias, tenemos al Barcelona con Tyrese Rice con contrato pero con ganas de ponerle en la lanzadera, mientras en Málaga buscan con cierta premura base de nivel para afrontar la Euroliga con un mínimo de garantías. Rice sabe que el Barcelona no le quiere y busca destino, pero el conjunto blaugrana nunca lo dejaría salir a Málaga sin obtener un beneficio a cambio, ¿Granger y su derecho de tanteo?, podría ser, aunque el base uruguayo sigue empecinado en jugar en la NBA.
¿Y que piensa de todo esto Joan Plaza?El entrenador catalán de Unicaja debe estar impaciente, muchos nombres asociados a su equipo y mas de un intento fallido, Rice no es precisamente el estilo de base que buscaba, además de que su ficha es inasequible para el club, en torno a los 2,1 millones, mucho tendría que dejar de ganar para terminar jugando en Málaga, pero empiezan a escasear las opciones y todo es posible. A media tarde y según ha podido saber este medio, desde las oficinas de los Guindos se ha planteado la posibilidad de que el banco haga un esfuerzo extra por traer a Granger, pero se antoja realmente complicado.