Se resuelve uno de los culebrones del verano. Kevin Gameiro abandonará el rojiblanco de la camiseta del Atlético para pasar a vestir los colores del Valencia. En las últimas horas ambos clubes se han puesto de acuerdo para resolver las pequeñas diferencias que hacían que la operación no pudiese llegar a buen puerto. De este modo, Marcelino tendrá a su disposición al francés para el debut liguero en Mestalla, precisamente contra el Atlético.
Hay algunas razones que explican la dificultad para alcanzar un acuerdo entre ambas partes. Primero, Simeone quería contar con un sustituto de garantías antes de dar el visto bueno a la marcha del francés. Por ello, el Atlético se puso en marcha para traer a Nikola Kalinic. Por otro lado, el club madrileño solicitaba una mejor oferta, alegando que el Borussia Dortmund podía llegar a ofrecer hasta 23 millones de euros. Sin embargo, el deseo del jugador de ir al Valencia siempre tuvo mayor peso en el destino de la operación.
Ahora, tal y como afirma el periodista Gianluca Di Marzio, la operación podría cerrarse en unos 18 millones de euros, de los cuales dos se pagarían en función de variables. El Atlético, a falta de un hipótetico nuevo mediocentro, cierra su ventana de fichajes particular. El Valencia, sin embargo, todavía debe dar salida a Simone Zaza para dar por completa la parcela ofensiva de una plantilla para competir en la Liga de Campeones.
Gameiro seguirá en la Liga Santander tras cinco años compitiendo en ella entre Sevilla y Atlético. Su etapa en el club andaluz fue la más fructífera de todas, pues anotó 67 goles en las tres campañas que pasó allí. En el Atlético no pudo mejorar esos registros. 27 goles repartidos en 82 encuentros de rojiblanco fueron la definición de un delantero que nunca logró encontrar la regularidad. Ahora, a orillas del Turia, tendrá que competir por un puesto con Santi Mina, Rodrigo Moreno y otro nuevo refuerzo, Michy Batshuayi.