Todo atado entre Rosales y el Betis, ahora toca negociar con el Málaga CF, tarea que podría ser más fácil de lo que parece debido a las necesidades de hacer caja del club malagueño.
El lateral venezolano comunicó ya la pasada temporada su deseo de abandonar la entidad de la Costa del Sol en busca de crecer profesionalmente, dado el estado y estancamiento del equipo malaguista, pero no ha sido hasta el reciente descenso cuando el venezolano pidió al Málaga negociar su salida con los clubes que se interesasen por él.
El equipo de Muñiz necesita meter en caja alrededor de 9 millones de euros una vez ajustadas las cuentas, la bajada de los derechos televisivos y el reajuste general de presupuesto, pone al club en la necesidad de reducir la masa salarial, de ahí que muchos jugadores se hayan puesto en la rampa de salida para aligerar exceso de equipaje en cuanto a lo económico.
Por tanto Rosales, no será el único en abandonar Martiricos, el club se encuentra con el problema de tener demasiados jugadores en plantilla y muchos de ellos no sólo con una alarmante falta de calidad, incluso para la segunda división, sino también con fichas inasumibles a día de hoy.