Inglaterra venció por 6-1 a Panamá en el partido que abría esta jornada dominical. El equipo dirigido por Southgate despeja así las dudas que crearon en el primer partido ante Túnez e iguala a Bélgica en absolutamente todos los registros. Panamá, no obstante, se marchó contenta tras anotar el primer gol de su historia en la Copa del Mundo. Ya dijo su entrenador, Hernán ‘Bolillo’ Gómez, que estaban aquí para aprender. Se sufrió pero valió la pena. Ahora se enfrentarán a Túnez por el tercer puesto del cuadro.
De forma bastante controvertida se dio el pistoletazo de salida al encuentro. Loftus-Cheek había dejado atrás a varios rivales en una carrera por banda, colgó, y, en el intento de remate, Gómez propinó un severo codazo en el área a Lingard que bien pudo significar la pena máxima. No podrían quejarse los ingleses, ya que más tarde el colegiado señaló dos penaltis a su favor.
Inglaterra se activó pronto. Si ante Panamá su mejor arma fue el balón parado, en este duelo la pizarra de Southgate tampoco defraudó. Trippier centró en el primer saque de esquina del partido y se inició una soberbia jugada de laboratorio. Kane y Henderson arrastraron a sus marcadores y Young bloqueó a Murillo para que no pudiese coger a Stones. El hueco que se liberó lo aprovechó el central del City para atizarle a la pelota un tremendo cabezazo picado que se introdujo en la meta canalera. John Stones marcaba así su primer tanto con la camiseta británica.
Pero los Tres Leones no se detuvieron. Tenían delante un rival que no mostraba gran oposición y había que aprovecharlo para marcar el mayor número de goles posible. Así lo hizo cuando, en el ecuador del primer tiempo, Lingard avanzó en solitario hacia la portería rival. Escobar, que llegaba tarde, le derribó por detrás y el colegiado extendió el brazo hacia el punto fatídico. Curiosamente, fue el primer penalti que lanzó Inglaterra desde 2002, con Beckham marcando frente a Argentina.
Kane se encargó de ejecutar la pena máxima, y bien podría dar clases magistrales de cómo se tira desde los once metros. Poca carrera, pasos largos y un misil cuyo objetivo era la escuadra derecha del arco panameño. Penedo acertó el lado, pero la potencia y colocación del golpeo hicieron imposible su alcance. Panamá, de la mano de Bárcenas, intentó acortar diferencias con un disparo lejano y un buen remate a centro de Rodríguez, pero ambos se marcharon a centímetros de la meta de Pickford.
Pasada media hora del duelo, Inglaterra ya estaba completamente desatada. Se iniciarían 15 minutos de auténtica locura comenzando con un balón conducido por Lingard. El mediapunta del United estaba siendo de los más destacados de la jornada. Se vio presionado, tiró la pared con Sterling, y, desde la frontal, realizó un lanzamiento con rosca que entró con suavidad por la escuadra. Ya era el tercero y se preveía una lluvia de goles para los minutos venideros.
Dicho y hecho, otra jugada a balón parado, otro tanto para Inglaterra. Gareth Southgate volvió a sacar a relucir su mágica pizarra. Falta en la frontal, Trippier sacó en corto para Henderson, este colgó para Kane, que a su vez cabeceo en corto para Sterling. El joven extremo solo tenía que meter la cabeza para anotar el cuarto, pero el portero canalero lo evitó. Sin embargo, el rechace quedó suelto, y ahí apareció la cabeza de uno de los jugadores más lúcidos del día: Stones. Si ante Túnez el dominio aéreo fue tarea de Maguire, hoy fue John quien se hizo notar por alto.
No obstante, la fiesta inglesa no había terminado, ni mucho menos. Era el minuto 43’, otro córner para Inglaterra. Sinónimo de extremo peligro para Panamá. Godoy agarró de manera descarada a Kane y Ghead Grisha decretó la segunda pena máxima del encuentro. Cómo no, Harry Kane fue el encargado de ejecutarlo. Igual que el primero, trallazo a la escuadra derecha, aunque esta vez Penedo se decantó por dejarse caer hacia la izquierda. Inglaterra jamás había vencido por más de cuatro goles de ventaja en la Copa del Mundo, y eso que el marcador estaba 5-0 a los 45’.
Los 15 primeros minutos tras la reanudación fueron más relajados. Inglaterra, eso sí, siguió llegando con asiduidad. Panamá había logrado despejar un córner, lo cual era noticia visto lo visto hasta el momento. En el 61’, Loftus-Cheek disparó desde la frontal y el esférico rebotó en un Kane que pasaba por allí. El gran momento de forma del punta del Tottenham hace que hasta los balones más tontos le entren sin querer. Así fue, el rebote desvió la trayectoria que había previsto Penedo y la pelota cruzó la línea de gol.
Ante tal goleada, Southgate tomó cartas en el asunto. Los seis tantos hacían que Inglaterra venciese a Bélgica en una diferencia de goles que puede ser decisiva en la última jornada ante los Diablos Rojos. Los británicos ya habían cumplido, por lo que el seleccionador natural de Watford decidió dar 30 minutos de descanso a Kane, Lingard y Trippier, que dieron entrada a Vardy, Delph y Rose respectivamente.
Sin embargo, bastaron unos cuantos minutos de relajación local para que Panamá marcase el primer gol de su historia en los Mundiales. Fue a balón parado, curiosamente, por lo que los canaleros dieron a Inglaterra de su propia medicina. Avila colgó al punto de penalti y allí apareció el recién entrado Felipe Baloy. Se lanzó y remató duro y raso, donde más duele a los porteros. Poco pudo hacer Pickford. La alegría se desató en las gradas, como si de una victoria se tratase.
No sucedió mucho más hasta el pitido final de un duelo que deja muchas conclusiones para el estudio. Ambas aficiones se marcharon contentas a casa. Panamá marcó el primer gol de su historia en esta competición. Inglaterra, por su parte, se jugará el primer puesto del grupo G el próximo jueves ante Bélgica, tras lograr igualar la diferencia de seis goles a favor con esta. Además, Kane, que ya lleva cinco dianas, se aupó al primer puesto de máximos goleadores por encima de Cristiano, Lukaku, Cherysev y Costa.
Ficha Técnica
Inglaterra: Pickford; Walker, Stones, Maguire; Trippier (Rose, 70’), Loftus-Cheek, Lingard (Delph, 63’), Henderson, Young; Sterling, Kane (Vardy, 63’)
Panamá: Penedo; Murillo, Torres, Escobar, Davis; Bárcenas (Arroyo, 69’), Cooper, Gómez (Baloy, 69’), Godoy (Avila, 64’), Rodríguez
Goles: Stones (8’, 40’), Kane (22’, p., 45’, p., 62’), Lingard (36’) y Baloy (78’)
Árbitro: Ghead Grisha. Colegiado egipcio. Amonestó a Loftus-Cheek (Inglaterra) y Cooper, Escobar y Murillo (Panamá)
Estadio Nizhny Novgorod. Jornada 2 Grupo G Mundial Rusia 2018