Uruguay es todo un clásico, una de las selecciones más importantes de la historia de los Mundiales. Pese a su corta cifra de habitantes, algo menos de cuatro millones de personas, este pequeño país latinoamericano siente una pasión enorme por el fútbol. Pues bien, ahora los charrúas están clasificados para la fase final de Rusia 2018 y vienen con ganas de darlo absolutamente todo para mejorar la marca conseguida en la Copa del Mundo de Brasil. Por aquel entonces, una gran Colombia liderada por James les echó en octavos de final.
Desde luego, la suerte les ha salido de cara esta vez. El sorteo celebrado el pasado 3 de diciembre indicó que sus rivales para pasar de la fase de grupos serían la anfitriona, Rusia, una selección africana, Egipto, y una asiática, Arabia Saudí. Rivales verdaderamente asequibles para lograr ese objetivo. De hacerlo, se enfrentaría a un adversario del grupo B, en el que España, Portugal e incluso Marruecos serán los favoritos.
Un estilo bien definido, con ellos mismos como gran amenaza
Su estilo de juego no oculta grandes sorpresas. Llevan alrededor de 12 años, desde 2006, bajo la batuta del mismo entrenador, Óscar Washington Tabárez, aunque el Maestro¸ como se le conoce allí, ya dirigió a Uruguay entre 1988 y 1990. Son tres las participaciones que lleva el técnico de Montevideo en los Mundiales, además de un título de Copa América conquistado en 2011. Un entrenador realmente experimentado que ha confeccionado un grupo de jugadores que se conocen a la perfección.
La Celeste juega un fútbol sin demasiadas exquisiteces, poco lúcido a los ojos de un espectador corriente. Pocas florituras, pocas acciones capaces de levantar de su asiento al aficionado. Todo ello se suple con la garra charrúa, esa capacidad de trabajo y de darlo todo que distingue a un futbolista uruguayo de cualquier otro jugador. Quizá no sea el fútbol más brillante, pero sí el más efectivo. Y esa variedad de estilos de juego es la que engrandece al deporte.
Claro está, entonces, que Uruguay no va a tener una abundante generación de fútbol ofensivo. Pero ellos juegan sus armas, y saben contrarrestarlo con una capacidad de aprovechamiento de sus ocasiones magnífica. No es para menos, pues su tándem de delanteros formado por Cavani y Luis Suárez es la envidia de numerosas selecciones. Además, son especialistas en el balón parado, faceta en la que jugadores como Godín, Giménez, Bentancur, o los dos nueves ya mencionados se hacen enormes de cara a puerta.
No obstante, todo indica que el peor enemigo al que se enfrentará la selección charrúa para pasar de ronda será ella misma. El hecho de que se enfrente a rivales relativamente sencillos puede provocar ese efecto tan temido por los técnicos, la relajación de sus futbolistas. Sabedores de que son favoritos, los jugadores pueden jugar ‘con el freno de mano puesto’. No sería la primera gran potencia que da la sorpresa y se queda fuera en fase de grupos, véase Francia en 2002 o Portugal en 2014.
Grandes ausencias en la convocatoria de Tabárez
Como en casi cada selección, la lista de 23 jugadores seleccionados para disputar la Copa del Mundo ha traído polémica. Uruguay cuenta con muchísimo talento entre sus futbolistas, y cada aficionado defiende a aquellos que en su opinión son merecedores de acudir a la cita mundialista. Ardua tarea la de Tabárez, que ha realizado una criba de la que se han caído, por falta de sitio, grandes estrellas. Estos han sido los elegidos por el técnico de Montevideo:
- Porteros: Fernando Muslera (Galatasaray, Turquía), Martín Silva (Vasco da Gama, Brasil), Martín Campaña (Independiente, Argentina)
- Defensas: Diego Godín (Atlético de Madrid, España), Sebastián Coates (Sporting CP, Portugal), José María Giménez (Atlético de Madrid, España), Maximiliano Pereira (Oporto, Portugal), Gastón Silva (Independiente, Argentina), Martín Cáceres (SS Lazio, Italia), Guillermo Varela (Peñarol, Uruguay)
- Centrocampistas: Nahitan Nandez (Boca Juniors, Argentina), Lucas Torreira (Sampdoria, Italia), Matías Vecino (Inter, Italia), Rodrigo Bentancur (Juventus, Italia), Carlos Sánchez (Monterrey, México), Cristian Rodríguez (Peñarol, Uruguay), Diego Laxalt (Genoa, Italia), Giorgian De Arrascaeta (Cruzeiro, Brasil), Jonathan Urretaviscaya (Monterrey, México)
- Delanteros: Maximiliano Gómez (Celta, España), Christian Stuani (Girona, España), Edinson Cavani (PSG, Francia), Luis Suárez (Barcelona, España)
Esta mañana, el Cuerpo Técnico de @Uruguay confirmó los 23 futbolistas que integrarán el plantel celeste en #Rusia2018.
11 de los 23 estuvieron en #Brasil2014 y 7 fueron a #Sudáfrica2010.https://t.co/NChjUNZZta pic.twitter.com/NH9vv4xN6B— Selección Uruguaya (@Uruguay) 2 de junio de 2018
En un principio, Tabárez elaboró una lista compuesta por 26 jugadores, de la cual se debían recortar tres antes del pasado 4 de junio. Los sacrificados fueron los mediocentros Federico Valverde (Deportivo, España), Gastón Ramírez (Sampdoria, Italia) y Nicolás Lodeiro (Seattle Sounders, Estados Unidos). La ausencia del primero fue la más llamativa, ya que está llamado a ser el timón del mediocentro uruguayo en un futuro no muy lejano. Los otros dos, por su parte, ya estuvieron en el Mundial de Brasil 2014, y eran habituales en las convocatorias de la Celeste.
