Película estadounidense del año 2017, del director Darren Aronofsky.
Hacía bastante tiempo, que no veía una película tan extraña en toda su globalidad. Este nuevo trabajo de Darren Aronofsky, sorprende y deja pasmado al espectador ante el desarrollo irracional de la trama que afecta a los dos personajes protagonistas. Seguramente algunos amantes del cine odiarán esta película después de verla, otros la aplaudirán, y en mi caso me quedaré en una situación intermedia, ya que no consigo descifrar qué es lo que pretendía contarnos el director con esta extravagante historia.
Lo que si se puede valorar, a pesar del desconcierto de gran parte de la trama, son las notables interpretaciones que realizan tanto Javier Bardem como Jennifer Lawrence. El primero demostrando las tablas que tiene como actor consolidado a nivel mundial, y la segunda encarnando a un personaje, con un registro dramático complicado y que finalmente consigue ejecutarlo a la perfección. Lawrence logra transmitir muy bien, todo el sufrimiento, dolor y angustia de su personaje.
También quería destacar el interesante papel que juegan en esta película la fotografía y el uso de las luces y las sombras, lo que hace potenciar la atmósfera asfixiante y absolutamente insólita de la historia y de sus personajes.
En definitiva una película muy rara y donde lo mejor son las interpretaciones de Javier Bardem y Jennifer Lawrence respectivamente.
Aquí puedes acceder al tráiler de la película: