21 de octubre de 1985. Centro comercial Twin Pines. El joven Marty McFly fue testigo del asesinato del doctor Emmet Brown por parte de unos terroristas libios. Al ser descubierto, los libios intentan acabar con su vida. La ametralladora falla y McFly ve una oportunidad. A pocos metros, el auto DeLorean está encendido. Se lanza sobre él, entra, toma el volante y aprieta el acelerador. Es perseguido por los libios mientras hace algunas maniobras de escape. En un momento, pisa el acelerador al fondo y aplica la sobre marcha, lo que le permite alejarse de sus perseguidores. Corre por su vida aunque no se percata que, cuando el vehículo alcance las 88 millas por hora, el auto lo llevará a vivir la aventura más increíble de su vida.
Esta escena pertenece a una de las películas de ciencia ficción más famosas del cine norteamericano. Es icónica. Así es, estamos hablando de “Regreso al futuro”. Su protagonista: Michael J. Fox. Marty McFly es, sin duda, su más famosa interpretación.
Fox es canadiense y nació el 9 de junio de 1961. Cuando tenía 29 años fue diagnosticado con la enfermedad de Parkinson, la cual causa un deterioro progresivo del sistema nervioso y afecta al movimiento. “Mi mente se puso en blanco. La enfermedad de Parkinson, para mí, era algo que le da a tu abuela, no era algo que le da a la gente joven” pensó el actor cuando recibió el diagnóstico.
Sin embargo, a pesar de la enfermedad, no se había mantenido alejado de la actuación… hasta ahora.
Michael J. Fox pone fin a su carrera en la actuación por deterioro de su salud.
El pasado 17 de noviembre, fue publicada una nueva biografía del actor. El libro, titulado No Time Like the Future: An Optimistic Considers Mortality (No hay tiempo para el futuro: un optimista considerando la mortalidad), expone una “más sobria y realística visión” de su vida que su biografía anterior, de acuerdo a la cuenta literaria de Los Angeles Times.
En esa misma memoria, Fox incluyó una nota donde concluye que su carrera como actor habría llegado a su fin. “Existe un tiempo para todo” escribió en su libro, “y mi tiempo de estar haciendo un día de trabajo de 12 horas, y de memorizar siete páginas de diálogos, se ha quedado atrás”. Fox dijo que piensa que esto sería como su “segundo retiro” y mantiene la esperanza de que su situación podría cambiar algún día, así que, “si esto es el final de mi carrera en la actuación, que así sea”.
La razón para esto es que su salud se ha estado deteriorando irremediablemente. En el libro confiesa que le ha tocado vivir situaciones de confusión y de pérdida de la memoria más a menudo, por ejemplo, estar buscando las llaves del coche para luego recordar que, hace tiempo, no conduce o estar haciendo preguntas a personas que, en realidad, no estaban ahí.
Y si eso no fuera suficientemente triste, el actor confesó que, de momento, está viendo un montón de programas de televisión antiguos para explorar una época “pre yo”, una realidad diferente. “Tal como esos actores, algún día yo sobreviviré en las repeticiones de los programas”. Realmente desconsolador.
