Alice Cooper, máximo exponente del rock teatral y uno de los nombres más importantes e influyentes en la historia del hard rock, vuelve a la actualidad con un nuevo disco de estudio, llamado “Paranormal”.
Seis años después de su anterior esfuerzo discográfico, aquel fantántisco “Welcome 2 My Nightmare”, el incombustible rey del “shock rock” ha grabado una nueva colección de canciones junto al histórico productor Bob Ezrin, responsable del sonido de sus obras más legendarias de los ´70 o del fabuloso último álbum de Deep Purple (podéis leer su crítica aquí), por poner unos pocos ejemplos.
Además de Ezrin, músicos del nivel de Roger Glover (Deep Purple),Billy Gibbons (ZZ Top), Larry Mullen Jr. (U2), Steve Hunter (Alice Cooper, Lou Reed, Peter Gabriel) o Tommy Denander (Michael Jackson, Deep Purple, Paul Stanley, Anastacia) han querido colaborar con Alice en la composición y grabación de “Paranormal”. Por si todo esto fuera poco, el bajista Dennis Dunaway, el batería Neil Smith y el guitarrista Michael Bruce, o lo que es lo mismo, los ex compañeros de Alice en el legendario Alice Cooper Group (solo falta Glen Buxton, fallecido en 1997), también han participado en el disco, grabando dos canciones junto al cantante con el que hicieron historia en el rock.
Todo esto hace de “Paranormal” un disco muy especial, que de seguro será escuchado por los fans del vocalista con máxima atención. Sin embargo, toda estas importantes colaboraciones poco importarían si el álbum no estuviese formado por buenas canciones, y por suerte, “Paranormal” contiene unos temas lo suficientemente sólidos como para dejar las colaboraciones en un segundo plano.
Como en su anterior álbum, en “Paranormal” Alice Cooper ha querido hacer gala de un rock de aire absolutamente setentero, plagado de crudos riffs de guitarra y potentes bases rítmicas, que perfectamente podrían haber formado parte de discos como “Killer” (1971), pero también de la grandilocuencia sonora y pomposidad instrumental de álbumes como “Welcome To My Nightmare” (1975). Entre las mejores canciones del disco podemos citar las rockeras “Rats”, “Dead Flies” y “Genuine American Girl” (esta última con la participación del Alice Cooper Group), o el estupendo primer single, “Paranoiac Personality”, que suena como una versión actualizada de su clásico “Go To Hell”. También son destacables por su calidad y su similitud con el sonido del citado “Welcome To My Nightmare”, los temas “The Sound Of A” y el inicial, “Paranormal”, este último con la participación en la composición y en la grabación del bajista de Deep Purle, Roger Glover.
En conjunto, este álbum suena compacto y convincente, algo encomiable para un artista de 69 años, con una trayectoria de casi medio siglo y una discografía a sus espaldas compuesta por 27 trabajos de estudio, contando este último. Lejos de convertirse en un acto de nostalgia, y aunque desde hace años perfectamente podría vivir de sus éxitos pasados, Alice Cooper sigue teniendo ganas de mostrarse relevante en el mundo del rock, de ofrecer nueva música y ser creativo, y ya solo por eso “Paranormal” merece ser escuchado, pero lo mejor es que además va a ser disfrutado.