La sociedad avanza y el léxico que utiliza no se queda atrás. El uso que ha ido surgiendo de distintos términos han llevado que la institución más importante en cuestión de la lengua española, RAE, a actualizar su versión en línea, DLE, y aceptar palabras como selfi, meme, sororidad y escrache.
Selfi
Antes, para hacerse una foto, se podía recurrir a un espejo si estabas en la intimidad de tu casa o a una persona para que inmortalizase el momento de ese viaje tan bonito o ese recuerdo con los amigos o familia.
Con la llegada del móvil con primera cámara frontal, el Sony Ericsson Z1010, llegaba lo que ya se recoge en la RAE como autofoto, una revolución que ha empujado a la institución a recoger selfi entre sus actualizaciones.
Meme
Los memes ya dominan internet, en especial redes sociales como Twitter e Instagram, sin olvidar a páginas dedicadas a ellos, como Memedroid o Cuanto Cabrón entre otros. Ha sido tal la viralización, palabra cuyo verbo también ha sido aceptada por la RAE como “hacer viral un mensaje o contenido”, que igualmente ha sido incluida en esta renovación.
Pese a que su definición dista de ser la misma que la del padre de este fenómeno, el biólogo inglés Richard Dawkins, se adapta a su utilización actual y abarca tanto su parte más teórica como su parte más usada en la red.
Sororidad
La gran lucha social del presente desarrollado, la batalla contra el machismo, ha hecho que se pronuncie más que nunca la palabra sororidad. Incorporada en la segunda y tercera ola del feminismo, se ha transmitido como vínculo entre mujeres para erradicar la plaga de la discriminación de género mediante su empoderamiento, y así lo recoge la academia.
Aunque aún se resiste la institución a la petición del lenguaje inclusivo, tema que tiene dividida a la comunidad dentro del movimiento.
Escrache
Frente a la imposibilidad de combatir los desahucios, de ser una realidad cruel poco tratada socialmente, la Plataforma de Afectados por la Hipoteca decidió llevar a cabo la misma estrategia que la Agrupación HIJOS en Argentina, escraches, en este caso a diputados del Partido Popular.
Esta actuación muy discutida por su carácter intimidatorio, ha sido recogida también debido a su incremento de utilización en los años más duros de la crisis.
Así, la RAE demuestra que la lengua española está viva y ha merced de la innovaciones tanto técnicas como sociales utilizadas por sus parlantes.