Para este jueves estaba previsto el estreno en las salas de cines malasias del nuevo film de ‘La Bella y la Bestia’, la última adaptación de Disney. Pero una vez más, desde la Junta de Censura del país, han decidido aplazar dicho estreno hasta que se eliminen las escenas homosexuales que aparecen en la nueva producción.
Esta no es la primera vez que el país malasio elimina escenas de este tipo de sus pantallas, lo ha hecho anteriormente con películas tan conocidas como ‘La lista de Schindler’, ‘Saturday Night Fever’, ‘El príncipe de Egipto’ e incluso ‘Babe, el cerdito valiente’.
La sociedad del país empezó a darse cuenta de este problema cuando las compañías cinematográficas que iban a realizar la emisión, Gold Screen Cinemas y TVG Cinemas, empezaron a devolver el importe de las entradas sin dar más explicaciones. Una vez devueltos todos los importes que habían recibido, el presidente de la Junta de Censura, Abdul Halim Hamid, habló para el diario malasio ‘The Star Online’ y aseguró que la película “había sido aprobada con la calificación de mayores de 13 años y con un corte menor”, corte referido a un “momento gay” según remarca Halim, que había en la producción norteamericana y del que habían estado pendientes desde que el director de la misma, Bill Condon, asegurara en la presentación del film que éste “incluiría por primera vez, un momento bello y exclusivamente gay”.
La escena en cuestión ya ha sido cortada y la versión se emitirá en breve, sin ningún problema para la sociedad del país en el que hay una gran mayoría musulmana y donde la homosexualidad está proscrita por ley.
Por su parte, el ministro de turismo de Malasia, Nazri Aziz, también ha hecho declaraciones al respecto en los medios nacionales, refiriéndose a esta censura como propia de “una policía de la moral”, remarcando que hay muchos más temas que podrían herir la sensibilidad de la sociedad musulmana y no están siendo censurados, como por ejemplo, según recalca el ministro, “en la mayoría de películas, el guión incluye violaciones, asesinatos…” que también son ilegales en el país pero no están prohibidos exhibirse en los films.
A parte de Malasia, hay otros países que han aplazado o suspendido el estreno de la película por los mismos motivos que han expresado los malasios. Rusia, por ejemplo, la ha catalogado como no apta para menores de 16 años; en Singapur, la Iglesia Anglicana ha lanzado un mensaje de alerta a todos los padres para que tengan un mayor control sobre lo que ven sus hijos y señalando el alto “contenido sexual”, así como la separación de “los habituales valores saludables” que se han asociado siempre con la productora Disney; por último, un cine al aire libre de Alabama, en Estados Unidos, ha sido capaz incluso de prohibir la proyección por dichas escenas.