Es de esos tipos de verdad. De los que muestran todo a voz de grito. De los que cuidan lo suyo, su canción, su envoltorio. De los que miman la música. Y cuando tiene algo entre las manos no duda en romper todos los moldes. También se pone nervioso y le cuesta no dar saltos hasta que sus trabajos salgan de él para entregárselo a su gente: un estallido de emociones a piel erizada. Y qué bien.
Es David Martínez, Rayden, quien este viernes ha publicado Beseiscientosdoce, el segundo adelanto del disco de Sinónimo, que verá la luz el próximo mes de enero.
Y lo cierto es que cuando dice que es el disco de su vida o con las mejores canciones que ha hecho hasta la fecha está contando toda la verdad. Así lo ha vuelto a demostrar.
Porque si con Caza de pañuelos su poesía y música se unen de nuevo para defender un mensaje importante y necesario para la sociedad actual, donde dirige una crítica al machismo con la imagen reinvidicativa de la mujer con un sonido fuerte y entero, Beseiscientosdoce tiene uno rompedor y con mucho carácter del que la idea hace mostrar la visión desde la trampa de ver con óptica infantil el mundo adulto; el descontento y lo insustancial.
[Sumario]
Para el videoclip de este trabajo, Rayden se traslada a Islandia para embebecer con unos de los paisajes más bonitos que quizás hayas podido ver y en el que la naturaleza se convierte en el protagonista del tema.
"Esta es la historia de un viaje, una fantasía escapista hacia dentro, hacia el interior. Posiblemente este año haya sido el año que más cambios he tenido a nivel vital. Un año donde hasta mim mente me llegó a decir "¡Basta!". A veces viene bien hacer un repaso de las huellas que te han llevado hasta donde estás, mirar alrededor para comprobar cuáles de las personas que están a tu lado siguen sumando y dejar al resto atrás. Volver a dar valor al término "amistad". Redescubrir lo realmente importante y sacar fuerza de flaquezas pero no malgastarla por lo que no se merece ni luchar; esta es la historia de un viaje, si seguís aquí a mi lado es que seguís sumando. Dejad que os enseñe lo que viví en el viaje de mi vida", concluye.
Un viaje de emociones de un tipo que se muestra con el corazón en alto. Y qué bien.
[..Y encuentra ese consuelo,
El consuelo del que busca la serpiente,
Que se come al elefante,
Escondido detrás de ese sombrero].