La raza de ovinos Santa Inés fue creada mediante el cruzamiento de la raza de origen italiano Bergamasca con la raza Morada Nova, proveniente de Brasil.
El ovino Santa Inés posee un bajo contenido de grasa y su piel se caracteriza por ser de muy alta calidad, razón por la cual es utilizada ampliamente en la industria textil. Se caracterizan por ser animales muy precoces y dotados de mucha rusticidad que los hace adaptables a los ambientes más desfavorables.
El origen y distribución de la raza Santa Ines
La raza Santa Ines es originaria de la zona Nordeste de Brasil y es producto de cruces de ovejas de pelo autóctonas de la zona y de origen africano, con carneros sementales de diversas razas, entre las que figura la raza ovina italiana, Bergamasca.
Santa Ines, hoy en día es considerada la raza ovina de pelo más importante en la producción de carne de cordero en Brasil, siendo una de las más difundidas entre los productores ovinos, especialmente en climas tropicales de ese país, extendiéndose hacia otros países de la región como Venezuela, Colombia y Paraguay debido a su excelente desempeño productivo.
Ganancia diaria de peso y calidad de la carne del ovino Santa Ines
La raza de ovejas Santa Inés, es fundamentalmente productora de carne y las hembras se caracterizan por una excelente habilidad materna que les permite producir corderos con muy buena tasa de crecimiento, tanto en sistemas intensivos de confinamiento como a pastoreo.
Son altamente resistentes a parasitosis gastrointestinales y pueden llegar a ganancias de peso que sobrepasan los 250 gramos por día en condiciones de confinamiento, lo cual permite alcanzar pesos adecuados para el beneficio a una edad temprana, garantizando con esto, obtener animales con una carne de terneza extraordinaria y magra, cuyos porcentajes de grasa y colesterol son inferiores a las razas lanares productoras de carne.
Los ovinos de la raza Santa Inés criados en pastos nativos pueden llegar a pesar 38 kilos en 360 días. Los pesos promedio de los corderos de esta raza son: 3,5 kilos al nacimiento, 19 kilos al destete (112 días) y 25 kilos a los 196 días de edad. Suelen tener una muy baja tasas de mortalidad y los adultos suelen pesar entre 85 y 95 kg, alcanzando en algunos casos los 100 kilos.
Aspecto general y características anatómicas de los ovinos Santa Ines
Dentro de las principales características de la raza ovina Santa Inés se destaca la rusticidad. En este aspecto, estos animales superan a otras razas ovinas, pues muestran un comportamiento similar a las cabras, en lo que se refiere a la búsqueda de alimento, lo cual garantiza que se mantengan en excelente condiciones corporal.
En relación a su conformación anatómica, el ovino Santa Ines tiene una cabeza de tamaño medio bien proporcionada con su cuerpo y desprovista de cuernos, con un característico perfil semi-convexo, heredado de sus ancestros italianos.
Posee orejas en forma de lanza y cubiertas de pelo, con la base firme y un poco por encima del nivel de los ojos, ligeramente inclinadas hacia la longitud de la cabeza. Los ojos son redondos y brillantes con una frente lisa provista de pelos lisos. En hocico es amplio y pigmentado, en el que se observan las fosas nasales dilatadas y bien separadas para garantizar una buena entrada de aire.
El cuello y los hombros de los ovinos Santa Ines son de proporciones moderadas, anchos y musculosos. El pecho es profundo y amplio y los miembros anteriores son rectos, fuertes y bien implantados con buenos aplomos y pezuñas no muy abiertas.
Los cuartos Traseros de los ovinos de la raza Santa Ines dejan ver una grupa un poco delgada pero bastante grande, carnosa en animales adultos.
En cuanto al pelaje del ovino Santa Ines, estos varían desde el café oscuro al negro, siendo este último el pelaje más predominante. La piel es pigmentada y puede haber capa roja, negra, blanca y combinaciones de las mismas, cubiertas de pelos cortos y lisos. El espejo nasal, el perímetro de los ojos, la vulva y el perineo periné deben ser oscuros.