Terminó la edición 2020 del Consumer Electronics Show (CES), el evento que reúne desde 1967 a desarrolladores y usuarios amantes de la tecnología y la innovación. Esta vez recibió a más de 175 mil visitas de todo el mundo en su sede de cabecera, el casino hecho ciudad llamado Las Vegas. Y con 4.500 expositores se dieron a conocer productos, dispositivos y hasta robots para todas las posibles necesidades humanas, algunas más curiosas que otras.
Por ejemplo, presentaron a Insta360 ONE R, una cámara 360 con un sensor de una pulgada que tiene la capacidad de grabar en 4K con un lente gran angular. También a Prinker, una suerte de impresora portátil pero para realizar tatuajes temporales utilizando un material resistente al agua que se borra fácilmente.
Una de las grandes sorpresas fue el Personal Air Vehicle, un prototipo de taxi aéreo desarrollado por la unión entre Hyundai y Uber. Con este vehículo parecido a un helicóptero se podrán recorrer hasta 100 km a 300 km por hora y transportar hasta 4 personas, incluido el conductor.
También estuvo presente Robo-C, un robot hecho por Promobot, capaz de imitar a cualquier persona de manera hiperrealista. Está pensado para desempeñarse como asistente en lugares con atención al público, como museos y parques.
Pero hubo dos temas centrales durante el evento: el advenimiento de las pantallas flexibles y la domótica, un tipo de desarrollo de sistemas que busca automatizar a los hogares, es decir, hacerlos “inteligentes”.
Lenovo presentó ThinkPad x1 Fold, una computadora de menos de un kilo con pantalla OLED que puede variar en su utilización (como ordenador o como tableta) gracias a la flexibilidad de su pantalla de 13,3 pulgadas. Por su parte, Royole, la empresa que sacó a la luz el dispositivo móvil plegable antes que cualquier otro fabricante, expuso Mirage, su parlante inteligente que además tiene un display flexible envolviendo el altavoz.
Por otro lado, para el hogar se exhibieron cunas “smart”, capaces de imitar los movimientos de los padres a la hora de hacer dormir a un bebé; pijamas inteligentes que mantienen registro de variables de salud y de hábitos, y robots que llevan papel higiénico al baño cada vez que se termina.
Lo que se espera con estos productos es mejorar la calidad de vida de las personas en todos los aspectos posibles: por ejemplo, con un casco que al dormir ejercite la habilidad natural del cerebro para descansar correctamente. Funciona con un mecanismo parecido al de un encefalograma que mide las actividades cerebrales y a cuyos datos y resultados se podrían acceder a través de un dispositivo móvil conectado al casco. Según sus desarrolladores, lograría hacer dormir a las personas un 40% más rápido y reducir el despertar esporádico en un 53%.
Más allá de los gadgets, el CES promete ser una experiencia global en relación a la tecnología. Por esto, miles de visitantes pudieron ser parte de un símil del estudio cinematográfico de Los Cazafantasmas hecho por Sony, así como participar de sesiones de pruebas de audios y sonidos envolventes, entre otras.