Entendemos por sexualidad en la adolescencia a aquella en la que los jóvenes se desarrollan física y mentalmente, adquiriendo caracteres sexuales secundarios, que son aquellos que no tienen que ver directamente con el órgano reproductor, como es el caso del ensanchamiento de caderas en las mujeres o la aparición de la nuez en los hombres. Durante esta tapa de cambio se despierta el pensamiento sexual y surgen sentimientos, deseos, fantasías y emociones desarrollándose durante esta etapa lo que se conoce como identidad sexual.
Los adolescentes en nuestro país se enfrentan a este periodo tan importante de sus vidas totalmente desarmados, con un desconocimiento profundo de todo lo relacionado con la sexualidad y los cambios que están experimentando, por lo que recurren a fuentes de información, generalmente en la web, que no son demasiado apropiadas para según qué edades, ni mucho menos como primer acercamiento al sexo. Nos referimos a las webs xxx de sexo gratis o a la pornografía, que les procura una idea bastante errónea de lo que en realidad es un encuentro sexual y cómo deben de ser estos en una relación sana y natural.
Una mejor alternativa, en vez de recurrir a estas fuentes tan explícitas como poco certeras acerca de la sexualidad y que hacen que ellos mismo se fijen unos estándares en cuanto al sexo poco reales, creando falsas expectativas acerca de lo que les espera, es recurrir a fuentes escritas, como cuentos, relatos, historias… para ir adentrándose en este mundo que les es del todo desconocido de manera creativa e imaginativa.
Embarazos no deseados por falta de educación sexual
En cualquier caso una mala educación sexual es lo que produce que alrededor de 11 adolescentes al año se queden embarazadas en España, según datos aportados por el Ministerio de Sanidad, debido a no usar métodos anticonceptivos o a usarlos mal. Así mismo, varias enfermedades de transmisión sexual vuelven a aumentar alarmantemente entre la población más joven de nuestro país en los últimos años.
La mayoría de los jóvenes que empiezan a mantener relaciones sexuales, en el mejor de los casos cuentan con la información acerca del uso del preservativo para evitar embarazos no deseados y enfermedades, pero no con la formación o la educación sexual adecuada, por lo que ni siquiera están concienciados sobre la necesidad de su uso y está bastante relajados con el tema, con la creencia errónea de que nada de eso les va a ocurrir a ellos.
Según los expertos, como ya comentase hace unos años el doctor Vicente González Navarro, ginecólogo y presidente de la Sociedad Española de Contracepción (SEC), “La inmadurez a esas edades hace pensar que uno está libre de contagiarse de una enfermedad sexual y están muy equivocados. En las consultas vemos otra realidad”.
Mucha información en internet, poca o ninguna en casa y en la escuela
Mientras que los adolescentes acceden a una cantidad muy elevada de información sexual en internet, que no siempre es la información más acertada, no reciben ninguna, o esta es muy escasa, en el hogar o en la escuela.
Una educación sexual adecuada es imprescindible para entender desde que se inician en las relaciones sexuales la importancia del sexo en la vida, enseñando que las relaciones sexuales deben ser siempre placenteras, sanas y seguras, inculcando el respeto y el cuidado de su propio cuerpo y el de sus parejas sexuales.
Desde la Federación de Planificación Familiar nos informan de que los jóvenes primero buscan la información que quieren saber acerca de sexo en internet o hablan con los amigos. Su segunda fuente de información suelen ser los servicios sanitarios o incluso los profesores cuando tienen algún problema, como la sospecha de algún posible embarazo o enfermedad, y en último lugar, acuden a sus padres.
Los médicos aseguran que el principal problema es que, por un lado, los padres no saben cómo hablar de sexo con sus hijos, aunque en ocasiones querrían hacerlo, porque todavía se considera un tema tabú debido a una educación en exceso moralista, y, por otro lado, se necesita contar con un plan educativo sexual en las aulas que se sigue negando por parte de las instituciones.
Se echan en faltas planes educativos sexuales en las aulas
En efecto, la educación sexual es una de las asignaturas pendientes en España, la información que se ofrece es muy vaga y además se centra tan solo en los aspectos biológicos, que queda muy lejos de aquello que realmente necesitan aprender los adolescentes en el periodo en que despierta su sexualidad.
Los jóvenes necesitan la figura de un educador sexual que les hable acerca de los sentimientos y emociones que experimentan, los cambios a los que se enfrentan, y cómo aceptarlos con naturalidad, si remordimientos y sin presiones, disfrutando de relaciones siempre consensuadas por ambas partes y en condiciones de igualdad.
Igualmente necesitan educación acerca de los medios anticonceptivos no solo para evitar embarazos, sino para protegerse frente a contagios, y además formación acerca de cómo utilizarlos correctamente y en todas y cada una de sus relaciones.
El profesorado reconoce que no tiene las herramientas para poder informar a sus alumnos acerca de cómo vivir la sexualidad, pues deben ajustarse a los contenidos que tienen que impartir, que les vienen dados, y que varían muy levemente de una comunidad a otra, pero que como decíamos anteriormente, solo recoge vagamente los aspectos biológicos, sin tener en consideración el resto de implicaciones psicológicas, emocionales y afectivas.
