Seguramente seas de esas personas que, cada poco tiempo, echa un vistazo a páginas web como www.testvelocidad.es para comprobar qué tal funciona la conexión a internet de casa. En los tiempos que corren, con la fibra óptica trayendo las velocidades más punteras y con las facturas que llegan a fin de mes, comprobar que todo está en orden para ofrecer el mayor ancho de banda posible con la tarifa contratada es algo de lo más habitual.
Ahora, que las conexiones inalámbricas vía Wi-Fi son más que frecuentes en los hogares, muchos se preguntan cómo conseguir que apenas se pierda calidad de señal. Los datos se transmite sin cables, a través de unas ondas que, cada vez que encuentran obstáculos o intentan llegar más lejos, van perdiendo intensidad, cosa que se traduce en un descenso en las velocidades de subida y de descarga.
Muchos hogares han visto cómo una conexión de 300 Mb pasa a ser una de 100 Mb si hay bastante distancia entre el router y el dispositivo con el que se conectan, y ya no digamos aquellas casas en las que hay más de una planta y se intenta trasladar la señal a toda la vivienda sin utilizar cables. La comodidad de las conexiones Wi-Fi es incuestionable, como tampoco lo son esos problemas que puede tener en lugares de grandes dimensiones.
No obstante, existen ciertas técnicas y trucos que se pueden llevar a cabo para hacer que no se pierda tanta señal, o para al menos poder sacarle el mayor partido posible a esa conexión de alta velocidad que has contratado para casa. Tan solo hay que llevar a cabo ciertas prácticas que son bastante simples, pero que pueden conseguir una enorme diferencia a la hora de comprobar velocidades.
¿Cuáles? Te las vamos a explicar aquí. Te vamos a dar 3 consejos clave para mejorar la conexión Wi-Fi de casa sin tener que gastar más dinero, tan solo haciendo unos pequeños cambios aquí y allá.
Cómo mejorar la conexión Wi-Fi en casa
Controla bien la ubicación de tu router
Puede parecer una tontería, pero el lugar donde coloques tu router es uno de los puntos más importantes a la hora de determinar la calidad y la intensidad de la señal inalámbrica. Debes buscar una zona en la que haya la menor distancia posible con respecto a todos los sitios donde suelas conectarte, ya que así te asegurarás de que no falle la cobertura y, por lo tanto, no se pierda ancho de banda.
Otra opción que puedes utilizar es la de colocarlo en el lugar donde más se utilice la conexión a internet. Si tienes un despacho en casa, ya sabes dónde debe ponerse el router; o si tienes una Smart TV y quieres disfrutar de contenido por streaming sin problemas. Una vez localices la ubicación clave, no dudes en aprovecharla. Notarás la diferencia con el paso del tiempo.
Elige bien el canal que vas a utilizar
Es muy importante que escojas bien los canales de transmisión de la señal. Ten en cuenta que hablamos de ondas y que, por lo tanto, ajustan sus frecuencias para funcionar en distintos canales, lo que a su vez puede traducirse en un mayor o menor ruido en la señal. Si hay un canal en el que coinciden muchos routers, todos ellos se pueden superponer y hacer que el dispositivo lo tenga algo más difícil para la transmisión de datos.
Lo mejor es que optes por aquellos más altos, ya que las configuraciones estándar suelen recurrir a los valores más bajos por defecto y, por tanto, a conseguir una importante saturación de dichos canales.
¿2,4 GHz o 5 GHz?
Puede que hayas empezado a escucharlo, sobre todo con las conexiones de mayor velocidad. Los routers ahora pueden crear dos redes inalámbricas, una de 2,4 GHz y otra de 5 GHz, o mezclar ambas en una misma. La primera se usa para las conexiones más lentas y tiene más alcance; la segunda es para las más altas, pero tiene menos alcance.
Nuestro consejo es que lo configures para que cree las dos redes por separado, ya que así cada una funciona con mayor libertad y no da pie a saturación por exceso de dispositivos. Además, podrás alternar entre una u otra en caso de contar con un aparato compatible con las dos sin tener que reintroducir la contraseña.
Solo necesitas hacer caso a estos 3 consejos y podrás ver cómo tu red Wi-fi funciona bastante mejor. También influyen las antenas que utilices o incluso el router que vayas a emplear, pero estos ya son aspectos que requieren pasar por caja. Prueba un buen test de velocidad y verás cómo, con estos pequeños ajustes, obtienes mejores resultados.