El mundo del urbanismo y la arquitectura siempre han cambiado los modelos con el paso de los años. Desde tiempos prehistóricos hasta el vanguardismo, pasando por el románico o el estilo renacentista, han dejado huella en cada una de las construcciones. De este modo, la arquitectura modular se presenta como un nuevo modelo vanguardista de realizar nuevos edificios con las últimas tecnologías, que inciden también en una mejora sistemática de los productos con los que trabajamos. Un tipo de edificación basada en una construcción modular medida y bien ejecutada, donde la proporción y la forma son algunos de los elementos esenciales para conseguir un buen inmueble.
Una definición poco conocida y de múltiples usos
La arquitectura modular se llama así al conjunto de sistemas de construcción cuya característica común es que son iguales entre sí, y se separan entre sí los elementos a través de los módulos. Dichos módulos de construcción suelen variar en tamaño y forma del material, con la principal ventaja de que suelen ser sustituidos.
La utilización de este tipo de estructuras siempre se ha extendido con el paso del tiempo. Por ello, se pueden encontrar construcciones modulares en cualquier ámbito de la sociedad, ya que los materiales se adaptan también a la perfección de la actividad a desarrollar por dicha empresa o individuo. Un ejemplo de ello son las casetas de construcción, que sirven para vivir de manera temporal a una persona.
También ámbitos como la educación y la sanidad ya han probado este sistema de construcción habitual para conseguir una modernidad y una sofisticación en su nuevo edificio. Por ello, demuestra que la arquitectura modular va ganando peso en la sociedad, y su utilización no se realiza sólo para fines privados o familiares.
Ventajas de elegir un nuevo tipo de construcción
Como toda construcción dentro del urbanismo de las ciudades, la arquitectura modular tiene algunas razones y ventajas destacadas para construir un inmueble. El precio de sus materiales suele ser muy económico si lo comparamos con otros tipos de construcción según el material. Unos componentes que, al ser económicos, también tienen la capacidad de ser reemplazables en cualquier lugar.
Este tipo de arquitectura se caracteriza por ser personalizable, por lo que las estructuras no se convierten sólo en permanentes sino que son construcciones temporales. Una arquitectura donde no se tarda nada en realizarla, y que también respeta la precisión geométrica de sus elementos. A la hora de comenzar una obra modular, los materiales son objetos no muy pesados, por lo que el transporte a nuestro lugar de trabajo es imprescindible.
La arquitectura modular también se caracteriza por tener unas pautas específicas y cumplir con todos los requisitos marcados para la certificación ecológica. Al ser unidades estandarizadas, podemos combinar dicha arquitectura con otros elementos, creando un diseño original en nuestro inmueble.
Por tanto, la arquitectura modular es un nuevo concepto de urbanismo diseñado para las nuevas familias y con la presencia de las nuevas tecnologías, que hacen posible su realización y que sigue yendo en auge. Su versatilidad, su utilidad y su realización no dejan lugar a dudas a la hora de ver un resultado final cuyos materiales respetan el medio ambiente. De este modo, las construcciones modulares son una nueva forma de hacer arquitectura en el día de hoy, y que con el tiempo, ganará más terreno en nuestra sociedad digitalizada.
