Seguramente hayas leído o escuchado últimamente las noticias en las que se cuenta que Huawei ha sido bloqueada del mercado estadounidense por posible espionaje y que hace poco detuvieron a la hija del CEO en Canadá por incumplir el bloqueo económico que Estados Unidos ha impuesto a países como Irán o Corea del Norte. Todo esto está muy bien, pero es solo un caso más de la guerra comercial que se está llevando a cabo por parte de algunos países para controlar la expansión de China.
Para ponernos un poco en contexto hay que señalar que existe una alianza de inteligencia llamado 'Los Cinco Ojos' en los que los países de sangre anglosajona (Australia, Canadá, Estados Unidos, Nueva Zelanda y Reino Unido) se han repartido el mundo desde la Segunda Mundial para controlar las posibles amenazas militares y comerciales mediante la red Echelon, una red de espionaje mundial que en su día ya fue denunciada por Snowden.
También es importante remarcar como las marcas chinas, con Huawei a la cabeza, le están comiendo la tostada a marcas como la todopoderosa Apple, algo que no ha gustado mucho a los inversores y más si vemos los problemas que está teniendo la marca de la manzana para vender los nuevos iPhone XS y iPhone XR, con rebajas en primera plana en su web por primera vez en años, por no decir siempre.
Pero más allá de eso, el recurso que más dinero va a mover en los próximos años es uno: los datos. Ya no hablamos solo de los datos personales que metemos en las redes sociales como Facebook, hablamos de datos de viaje, rutinas, pedidos de comida, hábitos, etc. Estos datos van a ser cada vez más relevantes con la evolución del Internet de las Cosas (IoT) y la inminente llegada de la tecnología 5G a nuestras vidas, unas redes que llevan años mostrando su potencial para crear un mundo hiperconectado entre las personas y los distintos aparatos tecnológicos que tenemos a nuestro alrededor. (No vamos a entrar en si eso da miedo o es bueno).
Esto del 5G es importante porque es precisamente Huawei uno de los actores más importantes en este campo, un campo en el que siempre ha sido una empresa puntera (seguramente tu módem tenga tecnología Huawei). Este gran poder de Huawei ha hecho que precisamente en los países de 'Los Cinco Ojos' la empresa haya sufrido últimamente bloqueos a la hora de colocar sus antenas 5G 'ante el peligro del espionaje'.
Y es que sí, todo este movimiento tiene que ver porque los países quieren tener acceso a nuestros datos y ya no se cortan a la hora de reconocerlo. Fue curioso que el FBI en su día considerase el iPhone como un móvil inseguro por no dejar una puerta trasera para piratearlo y espiar, una puerta trasera que hace poco se destapó que tenían (y seguramente sigan teniendo) los procesadores Intel, los más usados en la informática tradicional y empresarial.
Aquí los smartphones no se le libran y otra de las excusas para no dejar meter móviles Huawei en Estados Unidos ha sido precisamente un problema de peligro de espionaje. Y es que si manejas un poco el mundillo de los smartphones sabrás que Huawei crea sus propios smartphones, incluidos los procesadores, y emplean un sistema de cifrado propio que muy pocos conocen (Estados Unidos no está entre ellos) y además sus teléfonos son, junto a los iPhone, de los más complicados de piratear para usar ROMS o tener acceso Root, es más, hace nada dejaron de compartir esa información, una decisión que no gustó nada a los desarrolladores.
Todo esto hace que desde los países de 'Los Cinco Ojos' no se vea muy bien a Huawei (junto a otras marcas chinas como ZTE) y todo porque temen que sean un caballo de Troya que use China para espiar y dejen ellos de ser los 'únicos'.
La historia es un poco de 007 (es muy similar a la trama de Spectrum), lo sé, pero es curioso ver como desde la Casa Blanca se firman decretos en contra de productos de China o que empresas de Estados Unidos como Apple hayan anunciado que trasladan la fabricación de sus productos a India, un país 'amigo'.
Veremos en lo que queda todo estos finalmente y si llega la disputa a otras partes del mundo como Europa o América Latina. Lo que si es seguro es que la llegada del Internet de las Cosas y de la tecnología 5G vamos a ver como al mismo tiempo que mejoraremos nuestras vidas, nuestras vidas pasarán a ser datos que moverán mucho dinero sin nosotros saber que ese Google Home, ese Amazon Echo o esa lavadora que podemos poner desde el móvil son en verdad el anzuelo de la caña.
