Lo cuentan en el Twitter de la Guardia Civil y ha ocurrido en el municipio de La Alcarria de Brihuega (Guadalajara).
Parece que el hombre conducía su coche con el maletero bien cargado, cuando los agentes fueron a auxiliarle por algún problema y vieron que el vehículo estaba sobrecargado. Una sobrecarga de 400 kilos de siluro, ese pez de agua dulce propio de ríos y pantanos, que pescan los furtivos y venden aquí y allá.
Los 30 ejemplares eran de buen tamaño y ‘viajaban’ de incógnito en sacos de plástico.