La mafia nigeriana de la prostitución ha calado en toda Europa, por donde campa a sus anchas, porque con la caída de cada una de sus ramificaciones, otros proxenetas están más que dispuestos a dirigir el negocio de la esclavitud de mujeres, sus torturas y manejos en el narcotráfico, deslumbrados por los beneficios millonarios de los que disfrutan.
Lejos de menguar su poder y actividad, cuentan con amplia infraestructura para delinquir y evitar la acción policial, en España, Reino Unido, Italia, Libia, Níger y Nigeria. En España están en todas las provincias, donde cada semana se informa de un nuevo golpe a sus asentamientos.
En Torrelavega
En esta última operación, la mafia ha sido localizada en Torrelavega (Cantabria), donde se ha apresado a 7 de ellos; otros 2, arrestados en Vizcaya; 2 más en Alicante y uno en Mánchester (Reino Unido), a la vez que se ha liberado a 4 mujeres, obligadas a la prostitución, en nuestro país.
Torturas
Con cada caída de un tentáculo de esta mafia, sus integrantes recrudecen el trato a sus esclavas. Las someten a rituales de vudú-yuyú, que consisten en comerse un corazón crudo de pollo, mientras beben whisky y ellos les arrancaban uñas, el pelo de la cabeza y vello púbico.
La organización, que siempre está integrada por nigerianos, esta vez la dirigía una pareja desde Torrelavega, que se encargaba de controlar a las 4 ramificaciones de la red en diferentes enclaves de la geografía española.
Las víctimas liberadas se prostituían en clubes y pisos de Elda (Alicante), Santander, Zaragoza, y San Isidro de Nijar (Almería). El resto de los integrantes de la mafia trabajaban desde terceros países, la mayoría en África: Nigeria, Níger y Libia, para hacer el ‘pase’ de víctimas.
Operación internacional
La operación la ha llevado a cabo Policía Nacional, con Europol, la National Crime Agency (NCA) y la NAPTIP de Nigeria, en una investigación iniciada hace casi un año, que trasciende los delitos de trata de seres humanos hacia la falsedad de documentos, que facilita la entrada y traslado por el continente europeo de las mujeres. Los agentes han intervenido 23 teléfonos, para demostrar la actividad ilícita de la organización.