Una investigación de miembros de la Patrulla Fiscal y Fronteras de la Guardia Civil de Sagunto y funcionarios de Vigilancia Aduanera, a raíz de una intervención de bebidas alcohólicas sin precintos fiscales, realizada por agentes de la Guardia Civil de Castellón, ha dado con la localización y cierre de una destilería ilegal.
El negocio lo había montado un vecino de Alboraya (Valencia), de 60 años, que elaboraba orujos de distintas variedades, con materia prima de Galicia, y que vendía en distintos locales y provincias, con un etiquetado falso. Se han intervenido más de 700 litros de aguardientes de diferentes graduaciones y variedades.